Tenía mucho que decir y luego no tanto. Quise ser objetivo pero igual no lo logré. Cometí el error de leer lo de mucha gente pero afortunadamente, como este mismo texto lo indica, tengo mi propia opinión, a pesar de que sea o no popular. No odio a nadie y no me gusta ver que Live Talent se tropiece cada vez con la misma piedra, o con una parecida a la anterior, pero si vas a escribir algo, pues tampoco vas a lambisconear o mentir, para eso ya hay un puñado de "influencers" ¿no?
La guerra sucia contra Monterrey fue una de las peores ideas que han existido en el entorno de LT, sobre todo porque el festival norteño fue un éxito y porque, de así quererlo, cada festival de metal podría tener su nicho y su tiempo.
Esta es mi opinión, y si después algo cambia en mi, pues cambia y listo. Hoy...
Dice
la RAE que polarizar significa, entre otras cosas, “concentrar la atención o el
ánimo en algo” y “orientar en dos direcciones contrapuestas”. Por diversas
razones, Live Talent tiene ya desde hace algunos años, una tendencia a
polarizar opiniones sobre sus conciertos. Con suerte, al final de este texto,
cada quien podrá sus propias conclusiones. Estas son meramente las mías (Luis
Jasso, Chico Migraña).
Así
pues, ¿qué pasó en Knotfest meets Force Fest (o en español, Knotfest se
encuentra con Force Fest)? Ojalá hubiera una respuesta concreta y contundente.
Desde mi perspectiva, no es tan fácil.
Primero
que nada, hay que considerar ahora sí con firmeza el entorno. Si hay algo que
no me cuadra es el culpar a la gente, y antes de que se desespere nadie, aclaro
que esta idea no es y no será un esfuerzo por defender a quienes vandalizaron
el escenario. Lo que hicieron ese puñado de pseudo metaleros no tiene justificación,
pero es en todo caso la última gota en un vaso que se derramó poco a poco.
Tampoco estoy a favor de esa gente que usa sus redes sociales para pedir perdón
al mundo por lo que pasó en México, como si no hubiera sucedido antes en
algunos de los festivales más famosos del planeta; los que usan sus redes para
rasgarse las vestiduras y decir que “nunca más querrán venir bandas
internacionales a México”. Y este es gran parte del problema: las redes
sociales, su utilización sin ningún filtro para decir cualquier estupidez y lo
peor, cuando las usan promotores para que ciertos personajes, el sabor del día
o de la época, “ayuden” a difundir.
En
una conferencia de prensa que se llevó a cabo el domingo, previo al arranque
del Force Fest, Live Talent, por medio de su Director General, Javier
Castañeda, hizo varias declaraciones que pueden orientar al que quiera hacerlo,
sobre lo sucedido. Probablemente sin quererlo, él mismo destapó algunas de las
limitantes que llevaron al caos. Para no confundir a nadie, pero también para
no faltar a la ética más básica, no usaré comillas al referirme a sus dichos
porque no serán textuales, así que seré redundante en aclarar cuando lo escrito
sea lo dicho por él y cuando sea mi opinión.
Primero
entonces. Más allá de la sana competencia, esa que al final del día nos debe
beneficiar a nosotros como público, hay un fenómeno que ha sido muy
identificado con Live Talent, y es el uso de “personalidades” para promover sus
conciertos. Este año enfocaron sus baterías a polarizar a la gente en contra
del festival (maravilloso en su concepción, desarrollo y culminación, por cierto)
denominado México Metal Fest, que se llevó a cabo en Monterrey.
Alguna
vez un directivo de Live Talent me dijo que no fue intencional poner su fin de
semana metalero el mismo día que lo hizo Monterrey, que había anunciado su
fecha con muchos meses de antelación. Si es cierto o no sólo lo sabe él. El
veredicto en las autoritarias redes sociales es que fue una acción deliberada,
dicho que se sustenta además con los hechos del 2018, año en que, también, Live
Talent puso su Force Fest el mismo fin de semana que el México Metal Fest. Eso,
sin embargo, como quedó demostrado con el Sold Out norteño, fue más anécdota.
El problema ahí fue que algunos “personajes” y “medios” decidieron hacer
campaña de desprestigio contra el festival regio, y en favor de los festivales
capitalinos. El descaro fue tal que no habrá poder humano que convenza a la
mayoría del ciber mundo de que no se trató de algo pagado. Es decir, que
ciertas páginas tenían la consigna de atacar al otro festival a cambio de un
salario. ¿Por qué es importante todo esto? Porque una vez polarizada la gente,
si algo sale bien (MxMFIV por ejemplo) será reconocido y destacado, pero si algo
sale mal (Knotfest), el efecto búmeran hará que los reclamos sean mucho más
duros, que las reacciones se tornen mucho más radicales y que algunos con alma
de simio saquen su frustración como orangutanes enjaulados. Y justo así sucedió,
toda la carga negativa de las redes salió a colación en los momentos de mayor
tensión,
Yo
estuve en Knotfest.
Estuve
ahí cerca de dos horas y media porque fui a recoger mi acreditación. No me
interesaba prácticamente nada del cartel del sábado y tenía un problema en la
espalda que me impedía estar de pie por largos periodos de tiempo, así que me
dediqué a recorrer el lugar y crearme una idea de cómo estaría el domingo.
Honestamente,
a esa hora, entre las 3:30 y las 6:30, no había ningún problema. El Deportivo
es enorme, lo cual facilitaba que los escenarios no se empalmaran en cuanto al
sonido. Sí, cuando llegué, me pareció curiosa la ubicación del escenario
principal porque se notaba el puente vehicular desde el cual más tarde algunas
personas verían a algunas bandas. Obviamente no tenía idea de lo que pasaría
más tarde así que no me fui a ver si la valla aguantaría o no, pero si noté, y
no tengo por qué mentir, que no era una valla reforzada. Tampoco había los
llamados rompeolas, esas estructuras de barricada que dividen a la gente de una
zona (preferente por ejemplo) en dos grupos hacia la izquierda y la derecha. Es
decir, si miras de frente el escenario, la barricada de enfrente sería como la
parte horizontal de una letra T, y los rompeolas normalmente salen desde ahí
hacia la consola, lo que sería la parte vertical de esa misma T. Eso se pone
para evitar justamente que las aglomeraciones de gente sean peligrosas. Luego,
porque en la mayoría de los masivos en México sucede, contrario a lo que algunos
dicen en las redes, estaba la división entre preferente y general. Es decir,
que se divida al público entre pudiente y jodido está mal, pero es práctica
común, lo hacen en el Corona, el Vive Latino, los festivales de Ska, de Reggaeton,
de Banda, Punchis, Salsa… en todos. Normalmente, y quien haya estado en general
en algún masivo en el Foro Sol por ejemplo lo sabrá, esa barricada es doble y
reforzada. Es decir, hay dos hileras de barricada que forman un pasillo en el
cual normalmente hay personal de seguridad. A la hora que yo estuve ahí, que
fue durante tres canciones de la banda llamada Carajo, no había más de 3 o 4
elementos de seguridad en la barricada. Eso podemos achacarlo directo al
organizador, y se lo preguntaron a Javier en la conferencia de prensa (no tan
detallado, le preguntaron si no creía que faltó seguridad).
Su
respuesta fue que las autoridades te exigen cubrir ciertos criterios de
seguridad y tener cierto número de personas dedicadas a eso, y que cumplieron
con ello.
Yo
no lo dudo, pero si dudo que las autoridades sepan cómo funcionan los
conciertos. Es decir, a Live Talent le falló el cálculo. Por ahí dicen que se
quisieron ahorrar una lana. Bueno, eso no lo sé, pero todo esto que menciono es
algo que ya deberían saber luego de haber hecho conciertos masivos desde hace
varios años, y más si su estimado de gente el sábado era de 50 mil personas. A
estas alturas del partido, ya no se justifica de ninguna manera que sus
barricadas no sean reforzadas y que no haya elementos de seguridad suficientes
para mostrar presencia. Si no hay seguridad visible, sólo hace falta que una
persona se envalentone y haga algo que no debería hacer para que en instantes
se le sumen otros, y eso pasó.
Según
Castañeda, cuando supieron que se había roto una parte de la barricada, en
lugar de hacerse de la vista gorda decidieron compartir la información con la
gente de Evanescence y Slipknot. Enterados del fallo, las bandas decidieron
esperar a que se corrigiera el problema. Cuando vieron que se iban a tardar más
de lo esperado, él decidió que se le hablara al público desde el escenario para
hacerles saber del problema, pero el dueño del audio no quiso facilitar un
micrófono (sic). Y ojo, como ya dije antes, estas son palabras de él, no
interpretaciones mías. Presionado por alguna reportera sobre el nombre de la
empresa de audio, cambió un poco su dicho y aclaró que de todos modos, la gente
de Slipknot le dijo que no era buena idea hacerlo.
Ok,
mi opinión es que si el dueño del audio no te quiere abrir un micrófono, lo
mandas al diablo porque le estás pagando.
Más
adelante en la conferencia se habló de los ya famosos “grupos de choque previamente
identificados”, que es algo que estaba escrito en uno de sus boletines de
prensa. En ese caso dijo que aunque sabían quienes eran y los tenían
detectados, prefirieron no enfrentarlos para no generar violencia.
Mi
opinión es que si los tienes identificados, los sacas del inmueble con apoyo de
tu seguridad, que finalmente para eso está. El problema, creo, es que no había
seguridad suficiente.
Como
sea, aquí abajo está la liga a un video con la mayor parte de esa conferencia
para que cada quien la escuche y saque sus conclusiones.
También
es cierto que muchos “medios” (volvemos a lo nefastas que pueden ser las redes)
replicaron irresponsable y falsamente alguna información que hablaba de
heridos, gente con fracturas expuestas y hasta muertos, Nada de eso sucedió.
Honestamente,
porque lo conozco a él y conozco a varias personas que trabajan ahí, lo que me
queda claro es que no hacen las cosas mal por joder a nadie. Creo que en el
caso de Javier, que es y siempre ha sido la cabeza visible de la empresa, el
problema mayor es la soberbia. Y ojo, yo pasé por ahí también hace muchos años,
cuando este blog era muy popular, así que sé de lo que hablo.
Desde
mi óptica, Live Talent tiene con qué ser una competencia real en el mercado
metalero, pero su energía está mal encausada. Al ver el video queda claro que
el gran problema es no asumir responsabilidades, creer que todo es culpa de
alguien más, crear y creer teorías de la conspiración que, si bien en algunos
casos puntuales pueden ser ciertas, también son parte del negocio.
Los
comunicados de las bandas que sí tocaron coinciden todos en que la logística
fue mala y el audio en los escenarios, pésimo, y eso, aquí y en china, es
responsabilidad del promotor. Estos son fragmentos reales publicados por
algunas bandas en sus redes oficiales:
Behemoth,
a través de Nergal, hizo un chiste sobre el disturbio final y se hizo viral la
frase de “luego de ver Machete me quedó claro que no debes meterte con
mexicanos encabronados”. Sin embargo, antes de esa frase célebre, calificó la
logística en el escenario como un caos: “Ya no me quejaré del caos técnico que
privó en el escenario antes y durante nuestra presentación, ¡porque al menos
pudimos tocar!”. Ellos tocaron en el escenario principal, que es el que después
tuvo todos los problemas.
W.A.S.P.
expresó lo siguiente: “La planeación de este concierto se llevó meses y contaba
con el apoyo visual del video. Justo antes del concierto nos fue informado que
no podríamos usar video. El mayor problema de la noche fue que mientras la banda
estaba en el escenario, la electricidad que alimentaba el escenario
constantemente se sobrecargaba y se volaba. Eso sucedió cuatro veces, pero tras
la cuarta ocasión se nos informó que ya no tenía arreglo”. Ellos tocaron en el
llamado Tecate Stage, pero abreviaron su set debido a la falta de energía.
En
ese mismo escenario, horas antes, durante su presentación, el cantante de Of
Mice and Men comentó en al menos tres ocasiones que agradecía la entrega del
público, a pesar de la serie de problemas técnicos que vivían ellos en el
escenario.
En
el Force Fest, desde el escenario, Steve Souza de Exodus pidió aplausos para el
staff técnico de Rob Zombie, porque “si no hubiera sido por ellos, este
escenario no hubiera podido funcionar”. In Flames también hizo comentarios
similares.
¿Qué
significa todo esto? Que la parte técnica fue un caos y, tristemente, un
retroceso para Live Talent, porque lo realmente destacable del Force de Teotihuacán
había sido la impecable calidad del audio en todos los escenarios.
Entonces,
si no hay autocrítica, no hay avance. Si todo es culpa de todos menos de uno
mismo que es el responsable, difícilmente habrá un crecimiento. Si la empresa
se empeña en hacer lo justo necesario, el primer problemita se va a convertir
en un caos.
De
lo más triste, para mí, es la cancelación de las bandas nacionales sin
explicación alguna. En la conferencia, Castañeda ofrece disculpas a las bandas
y justifica las cancelaciones por un asunto de estrés y ansiedad por hacer que,
al menos, las bandas internacionales tocaran. El problema es y ha sido que, sin
poder asegurarlo porque no estoy dentro de su cabeza ni la de la gente que lo
rodea, la actitud parece ser tipo “las bandas nacionales son un mal necesario”,
cuando no es así. Y lo comento porque se lo dije en persona a uno de sus más
cercanos colaboradores, el año pasado: “tener bandas nacionales no es a fuerza,
pero si las vas a invitar, entonces debes tratarlas con respeto”. Sabemos que
por lo menos Mákina, Next, Jet Jaguar, Obesity y Tamadre ya no tocaron en el
Force, que estuvieron ahí desde temprano y que no hubo nadie que les explicara
nada. De esos cinco, sólo Mákina no hizo comunicado oficial, los otros cuatro
los puedes ver aquí, aquí, aquí y aquí, respectivamente. También, de acuerdo a
un comunicado oficial, Kaizan se presentó ante veinte personas porque los
obligaron a tocar cuando aún no se abrían las puertas: “gracias infinitas a los
asistentes que de alguna forma lograron entrar y vieron nuestro set -que nos
recortaron- (hicieron magia porque la mayoría de las personas siguen esperando
lograrlo y no abren las puertas o les dan acceso)”.
Here
Comes The Kraken también tuvo sus problemas. El manager, Andrei Pulver, comentó
lo siguiente: “Quiero hacer público que durante la presentación de Here comes
the Kraken los elementos de seguridad de la empresa Cóndores decidieron que no
iban proteger al vocalista de la banda por lo cual tuve que bajarme del escenario a hacerlo
yo mismo”.
Y
en este punto también es importante destacar que algunos de los grandes
promotores (paleros en algunos casos) del Knot meets Force son páginas o medios
que históricamente agreden a las bandas nacionales, se burlan de ellas y las
minimizan, lo cual es en todo caso una muestra de que no se les tiene por gusto
(excepto algunas que tocan casi siempre con ellos) sino por conveniencia. Y el
público no se queda atrás, porque ya que ven al caballo muerto, entonces lo
patean. Es decir, cientos de los comentarios en favor de las bandas nacionales
son solamente subirse al tren del mame, porque cuando esas mismas bandas tocan
en escenarios no tan grandes, el 90% de esos que tanto dicen apoyar, no sólo no
apoyan sino que minimizan, denigran y agreden.
En
fin. Sabemos que Evanescence y Slipknot estaban en México. Entendemos que lo de
la barricada puede suceder, pero sabemos también que lo que falló fue la
capacidad de respuesta ante un problema que debió haberse previsto.
Tristemente, no es la primera vez y, por el contrario, es el pan nuestro de
cada día en estos eventos: siempre pasa algo, pero siempre es culpa de alguien
más. Los delincuentes que quemaron cosas podrían ser identificados porque hay
fotos y videos, mínimo se debería buscar acción penal contra ellos. Y si eran
un grupo de choque ya identificado, con más razón. Como se puede escuchar en la
conferencia, esos daños los asumirá un seguro que se contrata siempre en este
tipo de conciertos masivos.
¿Habrá
Hell and Heaven? Yo imagino que sí, hay mucho dinero de por medio. El Oceanía
está en zona ruda, es cierto, pero también lo está el Palacio. El punto es en
todo caso reforzar (triplicar o cuadruplicar) la seguridad interna, poner más
luz en los trayectos entre escenarios y exigirle a la autoridad una mayor y
mejor presencia policiaca en los alrededores.
Ah
claro, también será importante dejar de polarizar. Los ataques de medios
ligados s Live Talent (ligados, no me consta que manejados por ellos) contra el
México Metal Fest fueron, por momentos, patéticos. Trolls hay en todos lados, sólo
basta ver las páginas en Facebook del Vive Latino, por ejemplo, pero ahí nadie
los alimenta. Promover la polarización es mal negocio, y es algo que ya también
deberían haber aprendido, porque no es la primera vez que se les revierte.
El
público tiene la última palabra, pero debe aprender a tener esa palabra por sus
propios criterios, y no porque el este wey, el aquél wey, la página fulana o el
perfil sutano se lo diga. Hay un borreguismo brutal en redes, y no aporta nada.
En todo caso, lo que deberíamos hacer todos es ser responsables de nosotros
mismos: si quieres ir a un show de Live Talent, deberás tener siempre en cuenta
su accidentada historia y saber cómo puedes protegerte como consumidor. Y
claro, creer más en canales oficiales que en pseudo informadores.
Aquí la conferencia.
Aquí la conferencia.