martes, septiembre 27, 2022

Helloween, reseña.

Foto Dilemma/Germán García

Lo siento pero no llegué a Hammerfall. Pero qué tal Helloween. 9:25 de la noche, nadie en la calle, pocos puestos, mal augurio. No sé por qué pero creí que tal vez había poca gente en la arena, porque normalmente hay barullo afuera. Será tal vez que en realidad han sido pocas las veces que he ido ahí (Scorpions, Deep Purple, aquél Festival Maquinaria con Slayer y Mastodon y poco más) pero todo estaba silencioso, calmo. Afuera. 


 Entramos muy rápido y fácil y en el par de puestos de merca oficial que vimos en el camino, ni un alma, y poco barullo, nuevamente. Tristeza. Parece que muchos estaban en Monterrey y que seríamos pocos los que veríamos a Helloween. Es más, como no había estado pendiente de mucho y hasta apenas dos o tres días antes pensaba que no iba a ir porque trabajo y no me daría tiempo, creí que tal vez solo habrían abierto la pista. Una vez localizada la puerta de entrada y cruzado el umbral, todo cambió. Había mucha gente. Sí, el último piso de la arena estaba cerrado, pero tampoco es que Helloween tenga el arrastre para abrirlo, estaríamos hablando de cerca de 20 mil personas y ps no, tampoco. La parte de atrás de General no estaba llena, la grada tampoco, pero calculaba unos 7 mil. Resultó ser que la entrada fue de nueve mil, es decir y como lo platiqué con Weikath, poco más del triple de lo que normalmente convocaban (al circo le caben 2 mil 500). Wow. Ya hace algunos años que he entendido que lo principal es como me la pase yo, jaja, ya si se llena o no, pues es bronca de otros. Claro, quería que le fuera bien a Dilemma. Quiero que le vaya a todos los promotores que hacen metal, pero ya no me angustio cuando no es así. 

 Pocos días antes se había anunciado que Helloween tocaría a las 10pm y fue entonces que me animé. Yo salgo de trabajar a las 9 (y me pude zafar a las 8:30), así que para mi todo era ganancia. El show empezó como 4-5 minutos después de las 10. Un escenario sobrio, con tres plataformas, dos a los costados y una al centro, esta última enmarcada en una enorme calabaza con ojos de encabronada que sostenía la tremenda batería de Dani Löeble y una pantalla al fondo. El truco sería entonces enganchar a la gente con la música. Lo lograron con creces. 

Foto Dilemma/Germán García

 “Skyfall” fue la presentación de la banda cuando lograron su primer disco como septeto, y fue su carta de presentación esa noche de sábado en la arena. Es temprano en la reseña para poner un pero y sin embargo hace falta: es un lugar de acústica prácticamente perfecta pero el inge de la banda se llevó su buen rato en agarrarle la onda. No sonaba horrible tampoco, pero en una escala del 1 al 100 estaba como en 80% de nitidez, y estaba claro que fue su problema, no los rebotes, no la estructura. Ok, ya saqué ese pero del sistema. “Skyfall” es Helloween 2022 en su máxima expresión. Rolota, de un disco muy bueno, difícilmente había una mejor opción para arrancar el show con la idea de hacerlo con el disco nuevo. Pero como sucede en el box, no se conformaron con un buen derechazo, conectaron un brutal uno-dos al escoger nada menos que “Eagle Fly Free” para segunda rola. 

 En mi presupuesto previo al show estaba contemplada alguna lagrimita, pero no pensé que fuera desde la segunda canción. No recuerdo todas las demás pero fueron varias así que baste decir que sucedió. Mucho. 
Foto Fernando Aceves

 Dicen que por ahí de los 14 años es que realmente un individuo define su gusto musical. Yo conocí a Helloween un poco más tarde, como a los 16, misma época que Over Kill (cuando haga la reseña del Candelabrum tendrá más sentido esta referencia), por ejemplo Ya no recuerdo que fue lo primero que escuché de ellos, sobre todo porque antes de comprar mi primer disco, escuchaba algunas rolas en los casets de algunos compañeros de la escuela, pero desde que salió Keepers 2 (para entonces tenía 17 años), “Eagle Fly Free” me ha acompañado. Después regresaron al disco Helloween con Mass Pollution. Ya desde ese momento comenzaba a notarse que entre la gente había muchos fans más jóvenes, que recibieron muy bien el disco. Más adelante se notaría más. 

 Igual que al inicio, si pones una rola nueva, proteges la vibra de la noche con otro trancazo y en este caso fue “Future World”. Pocas veces se me enchina la piel tan de volada como al corear junto a 9 mil personas esa entrada tan clavada en el imaginario colectivo metalero: “If you’re out there all alone, and you don’t know where to go to, come to take a trip with me, to future world”. Wow. 

Foto Dilemma/Germán García

 Ya para ese momento habíamos gozado a los tres cantantes y por supuesto, a los tres guitarristas. Ya en su momento destaqué lo bien que sonó Maiden hace algunas semanas porque por fin Janick Gers se puso a tocar, pero con Helloween es algo que sucede desde hace años ya, y lo hacen realmente muy bien. Sabes que son tres guitarristas no solamente porque los ves, sino porque los escuchas. 

 Siguieron “Power” y “Save Us” y es el momento ideal para retomar la parte de cómo se notaba que había muchos fans más jóvenes, y muchos de la era Deris el cual, por cierto aclaro, yo no tengo queja. La tuve por algún tiempo pero hace años que no. No voy a entrar al terreno de la descalificación disfrazada con comentarios tipo “Save Us es para conocedores”, pero no la tocaban en vivo desde 1989 y por supuesto, jamás había sonado en México. Más lagrimitas. Y después de eso vino la presentación (palabras más, palabras menos y por eso no va en comillas): denle la bienvenida al creador de todo esto, el señor Kai Hansen. El popurrí “oficial” dice que tocaron partes de “Metal Invaders”, “Victim of Fate”, “Gorgar” y “Ride The Sky”. En las dos giras anteriores no habían tocado ni “Gorgar” ni “Victim of Fate”, así que más para recordar, sobre todo porque Victim es de mis favoritas. Y vaya que la gente estaba muy prendida, pero parecía que muchos, tal vez algo así como la mitad no las conocían. Y no tiene nada de malo, son rolas de hace 37 años, esa mitad de público probablemente ni había nacido. El punto a destacar es que de cierto modo, creo, le debemos mucho a Andi Deris porque fue la voz de la banda durante muchos años, esos en que empezaron a venir a México y es en buena medida parte del motivo por el cual se ven hasta tres generaciones en los conciertos actuales. Y después del popurrí, “Heavy Metal is the Law”, vaya manera de rendirle tributo al pasado y de consentirnos a los que los escuchamos hace poco más de tres décadas. 



 Después llegó “Forever and One”, un tema que me parece ayuda a que respiren casi todos porque la mitad de la canción la hacen solo Sascha en la guitarra y Kikse y Deris en la voz. En México no la cantaban desde 2011 y me parece que este formato a dueto les funcionó tan bien en el video grabado en Madrid que lo retomaron, y a pesar de que para mi gusto no es la mejor balada que tienen, para el gusto del 90% de la audiencia sí lo es, así que ni para quejarse. 

Foto Fernando Aceves

 La tercera de las rolas nuevas fue “Best Time”, el sencillo más reciente, seguida por “Dr. Stein”. Ambas me gustan pero ninguna es mi favorita de sus respectivos discos. Siguió “How Many Tears” y para entonces llevaban poquito más de hora y media sin parar. Tiempo suficiente para apreciar detalles, como el hermoso bajo naranja de Markus Grosskopf y su estamina, no para de bailar y moverse y es además la mitad de la brutal base rítmica de la banda. También se podía ver, sobre todo en las pantallas de la arena, no tanto en la del escenario, el trabajo de Dani en la batería. No solo es brutal sino que lo hace como si nada a 2 mil 200 metros de altitud. Impresionante. También hubo tiempo suficiente de ver a Weikath, sólido, sin aspavientos pero ahí en las buenas y las malas. 

 Para el encore arrancaron con “Perfect Gentleman” y luego con “Keeper of the Seven Keys” en toda su gloria. Ya solo faltaba el climax y ese llegó al final con el segundo encore, “I Want Out”. Esta vez no hubo globos ni confetti pero ¿a quién le importa? Bueno, se menciona porque afectivamente algunos lo notaron, mi Castañita Kelpy Interesante entre ellos, pero no pasa nada, es pecata minuta porque lo que no faltó en esa canción fue el juego con la gente de que la mitad de la audiencia canta la melodía mientras la otra mitad canta el “I want out”. Fue probablemente lo más apegado a un script, o lo que menos sorprendió pero es al mismo tiempo el final que la mayoría querríamos (y no digo todos porque seguro alguno habrá que refunfuñe) y fue una cereza en el pay de calabaza que redondeó una noche de poquito más de dos horas de magia pura. 

Foto Fernando Aceves

 Un set muy bien balanceado, una banda que ya se nota totalmente compenetrada en su formato de septeto, en la que se siente una actitud de equipo en la que todos ponen su granito de arena en favor del grupo y no de cada quien. Por supuesto, al ser una reseña hecha por un fan abundarán las flores y faltarán las críticas, pero ¿cuál es el punto de destacar lo malo (que fue casi nada) cuando casi todo fue bueno? Igual si hubiera sido un desastre se menciona, pero como no, yo lo dejo ahí en nivel casi de fantasía. 

 Si llegaste hasta aquí, ¡muchas gracias! 

 Migraña en “Ride the Sky” mode on.

viernes, septiembre 23, 2022

Michael Weikath, entrevista.

Esta foto pertenece a ©pitpony.photography


Esta es la entrevista que hice con Michael Weikath en junio del año pasado. Para mí fue muy interesante y me permitió conocer a una persona muy distinta a como me la imaginaba. Él estaba en una especie de pijama y me pidió no grabar video, yo no pensaba poner video porque también estaba en pijama jaja, pero entonces convenimos hacerla así para tener la referencia visual, sin usar video.

Luego de que le dije que con esas preguntas era suficiente, antes de despedirnos empezamos a platicar fuera de registro y fueron como otros 25 minutos. Resultó ser un tipo muy agradable que también se notaba que no tenía nada que hacer, pero yo tenía que salir y tuve que cortar la comunicación, pero fue realmente entretenido y hasta cierto punto conmovedor, porque tiene pinta de mamón y es justamente lo contrario.

Como no me gusta el agandalle, lo que platicamos sin grabadora fue en verdad así, sin grabarlo, así que no puedo reproducirlo acá (además no me acuerdo jaja), pero insisto, fue una gran experiencia. Hansen por ejemplo contestó todo pero no usa ni una palabra más. Es muy amable y amigable pero sabe que está haciendo una chamba y así se siente, con Weikath en cambio era como estar en un bar, cotorreando sobre pendejadas. De las entrevistas más entrañables que he tenido. Y bueno, sin más, esta es la versión sin ediciones de aquella charla. Algunas preguntas se las hice también a Hansen, por si alguien lee ambas sí, y lo hago a propósito, jeje. 


¿Por qué ponerle el nombre de la banda al disco? Nunca antes lo hicieron ¿correcto?

Bueno de hecho sí, el primer disco que hicimos fue un mini álbum con Noise Records pero tiempo después, cuando salió Walls Of Jericho en CD, la disquera incluyó en él las canciones del mini álbum y por eso mucha gente tiene la idea de que nunca hicimos un disco autotitulado, no todo mundo conoce ese mini álbum, asumen que es parte de Walls Of Jericho porque todo es parte del mismo empaquetado, y cuando se enteran se sorprenden. Y para este teníamos varios títulos, consideramos Skyfall, The Impact o Indestructible o Out For The Glory o Fear of the Fallen pero no podíamos decidirnos y un día Sascha sugirió llamarlo solo Helloween, y pensábamos que era buena idea porque de alguna manera es como que somos una banda nueva, con siete miembros, tuvimos una gira muy exitosa, hicimos muchas fechas y todo el ambiente en general era muy bueno. Notamos que los conciertos provocaban en la gente muchas emociones, veíamos gente llorando, la mayoría de las veces podías notarlo con la gente de las primeras filas. Es como que la chispa de la banda se transmite hacia la gente y luego viene de vuelta hacia nosotros. Son momentos mágicos en el tiempo y es algo que no esperas que pase y además uno no sabe como lidiar con ello cuando sucede. Es fantástico. Y es muestra de que todo había sido muy exitoso. También lanzamos un sencillo llamado Pumpkins United en medio de la gira porque todo iba tan bien que la gente demandaba que sacáramos una canción nueva, así que lo hicimos. Y hay varias versiones, la puedes escuchar en su formato en estudio pero también hay un video en vivo. Y bueno, seguimos adelante, hicimos un show en Wacken, cerca de Hamburgo y fue un concierto enorme, muy exitoso, también lo grabamos para el DVD y Blu Ray en vivo y luego lo más grande que hicimos fue el último concierto de la gira, fue en Rock In Rio y había, no sé, 260 o 300 mil personas y eso también lo grabamos. Está en Youtube para quien quiera verlo y es algo de lo que estamos extremadamente orgullosos. Y así, con todo lo que ha pasado, todo fue tan positivo que sabíamos que deberíamos hacer un disco con los siete, y claro, era un reto pero también lo veíamos como una motivación para mostrar lo que somos los siete juntos. Yo creo que el resultado es muy bueno, es una colección hermosa de temas en él y las reseñas que hemos recibido de todo el mundo son realmente muy buenas, nos tienen muy contentos y orgullosos. Recibimos constantemente comentarios de como los que lo han escuchado lo disfrutan y les gustan las canciones y el sonido y bueno, eso es lo mejor que podría habernos pasado. Saldrá a la venta el 18 de junio de este año (recordemos que la entrevista es de 2021) y ahí veremos qué otras opiniones se generan.

 


No soy músico así que lo que voy a decir puede ser estúpido, pero, con todo respeto para ellos, cuando uno ve a Iron Maiden en vivo se siente como que tres guitarras es demasiado, no se escuchan tres guitarras, pero cuando yo vi el show de Pumkins United, en mi pobre entendimiento, como fan escuchaba ciertos arreglos que hace que se entienda que son tres guitarras. Entonces, ¿cómo es el proceso de componer con tres guitarristas, cuando solían ser solo dos?

Sí, es impresionante y es un problema porque nosotros también veíamos las cosas de manera similar a como le explicas, y no sabíamos como iba a salir, pero también tenemos un gran ingeniero de sala que logró que se sintieran las tres guitarras. Uno nunca sabe cuál es el concepto con Iron Maiden u otras bandas que salen con tres guitarristas, pero había una banda ochentera de EU, muy buena, se llamaba Leatherwolf y ellos tenían dos guitarristas, pero el cantante de pronto también tocaba y lo hacía muy bien, y siempre me pareció muy interesante la manera en que lo hacían. Nosotros no es que lo tuviéramos claro al principio, estábamos buscándole. Nosotros solemos tener melodías de cuerdas y voz, tenemos melodías armónicas y Sascha es un músico serio que es capaz de tocar muy bien la guitarra rítmica, es muy bueno en eso y además no le molesta que en ocasiones deba tocar la tercera armonía de las melodías por ejemplo, pero lo que suele pasar en el estudio es que tienes a estos guitarristas rítmicos y luego se le agregan las guitarras melódicas, eso es lo que queremos mantener. Y a veces no sabes lo que pasa cuando estás tocando en vivo, pero funciona y todos estamos contentos y confiados de lo que hacemos y no es relevante ser campeones mundiales del instrumento, solo estamos contentos de hacer lo que hacemos, los cantantes dan lo mejor de si y todo eso se combina y bueno, creo que es un concepto distinto a la banda que mencionas, tal vez ellos buscan lograr otra cosa distinta o tal vez hay algo de magia que quieren lograr y no sabemos. Nosotros hacemos lo nuestro, lo que creemos que es lo mejor para Helloween y estamos orgullosos y contentos porque funciona. La verdad es que lograr que funcione el concepto con tres guitarras en un inmueble grande, con un sistema de audio enorme es realmente complicado. En realidad lo que dijiste es interesante y no es para nada estúpido, al contrario, para mi es bueno saber que funciona.

 


Y funciona muy bien. Eso me lleva a esta otra pregunta. Ahora son siete, pero seis de los siete son compositores. No sé que tan común sea eso pero ¿cómo es el proceso para decidir qué canciones quedarán en el disco y cuales no? ¿Lo deciden entre todos, es cosa de un productor? ¿Cómo llegan al track list final con tantos compositores poniendo ideas?

Es una mezcla de todo eso. Todos los involucrados tratamos de ofrecer ideas nuevas que fueran muy buenas, y normalmente lo que pasa es que tienes canciones de una calidad similar, y es algo que es de esperarse, pero también todos traíamos ideas que eran raras o que eran muy diferentes a lo que se espera de la banda y entonces quedaba claro que sería muy complicado darle vida a ese tipo de canciones. Por ejemplo había una de Markus que será uno de los Bonus Tracks de la edición japonesa, se llama “We are real”, Kai Hansen hace casi toda la voz aunque tiene algo de Andi Deris pero es más como una rola punk y quizás por eso no terminó en la versión regular del disco, pero tratamos de mantenerla en alguna edición, pero para la versión normal de un disco tienes opiniones de los miembros de la banda pero también del management por ejemplo, y ellos no lo ven desde la perspectiva del músico sino de un escucha, como tú por ejemplo y entonces te dicen que no entienden tal canción. Y alguien más viene y dice que es realmente buena, pero otro dice que no la entiende y que tal otra es mejor y así hasta que eventualmente debemos encontrar una solución. Y la disquera también opina, y ellos también tienen una manera distinta de verlo. Entonces es una mezcla de todo eso. Y a veces es doloroso porque cuando tienes una canción nueva es como tu bebé y quieres expresar algo con ella pero eventualmente se queda fuera del disco, eso es bastante triste, es algo que puede hacer que sufras muchos desde una perspectiva creativa.  Cuando eso pasa esperas que al menos pueda ser lanzada como Bonus Track o lado B de un sencillo o en un disco posterior. Al final del día esperas traer algo más que sí quede en el disco porque cuando lo logras te sientes realmente orgulloso. Es un punto muy sensible, puede ser algo muy triste, pero hay veces en que todo es muy claro. Es una buena idea mantenerse dentro de un concepto y hacer algo cercano a lo que la gente espera en lugar de hacer algo aventurado, a pesar de que la aventura pueda ser muy interesante, es solo que tal vez la mayoría de la gente no lo va a aceptar o no lo va a disfrutar tanto como algo más cercano a su expectativa. Y ese es un problema cuando eres creativo.

 


Lo entiendo porque soy fan. La gente siempre quiere algo similar a los Keeper of the Seven Keys, pero para mi, discos como Master of The Rings, The Time of the Oath y Better Than Raw, los primeros tres con Andi Deris son muy buenos. ¿Crees que de pronto son eclipsados por los Keepers? Esos son importantísimos no solo para Helloween sino para el metal pero estos otros tres redefinieron a Helloween en los 90. ¿Tú como lo ves?

Sí, de cierta manera así es pero yo lo veo con mucho orgullo porque los hicimos. Y en ese tiempo era crucial y realmente importante hacer esos discos, y además funcionaron bien, nos permitieron seguir adelante y mira, te pongo un ejemplo. Yo soy fan de Muse, el disco Drones (Warner, 2015) me gustó pero yo esperaba algo más en la antigua vena de Muse, más cercano a lo que habían hecho antes y algunos temas tienen cierta vibra tipo U2 o Queen y no me gustaron porque no creo necesitar a Queen en Muse, si Queen por sí mismo ya existía, y entonces no me gusta tanto porque si quieren hacer I Want To Break Free en versión Muse a mi no me satisface porque ya lo escuché antes, y lo que hizo Muse es demasiado parecido al original. El punto es que siempre te encontrarás a ese tipo de fans y cada quien tiene su propia manera de sentir e idealmente quieres llegarle a la mayoría, pero siempre habrá esta fracción de gente que es más grande y que piensan así y tienes toda una gama de fans más jóvenes, tenemos fans de seis años de edad u ocho u 11 y obviamente responden de otra manera. Y hay temas que les gustan a todos como Future World o Dr Stein o alguna otra, pero lo más importante es que se diviertan. Nosotros debemos ver aspectos como la parte de negocio, la parte de composición y con suerte lograremos algo de éxito. Y luego cada quien se puede ir a los detalles y tratar de calificar la música y explorar cuáles pudieran ser los significados de las canciones o su efecto en la gente y demás y al final del día, si quieres hacerlo todo realmente complicado también es muy interesante. Al final si encontráramos ese punto en el cual todo lo que hacemos le gusta a la gran mayoría sería como encontrar una fórmula, pero es complicado descubrirla, y por otra parte, se trata de pasarla bien. Entonces, siempre hay gente, y yo me cuento entre ellos que analizan todo y llegan a conclusiones, pero no somos la mayoría, el escucha normal quiere sentir el ritmo y escuchar la melodía y el sonido de las guitarras y eso es lo que los tiene felices. Entonces cuando todo esto se mezcla es que tienes una buena banda o un buen disco. Y luego para gente como yo siempre es complicado desprenderse de lo que haces, porque luego llega alguien que te dice que tal canción no le gusta tanto y entonces uno piensa ¡¿qué?! Pero si es buenísima por esto y aquello y discutes. Pero el punto es que nunca sabes cómo funcionan los sentimientos de la gente, hay cosas que les ponen la piel de gallina y afortunadamente creo que eso pasó con la mayoría de las canciones que tocábamos en la gira pasada. Te digo que vi gente que lloraba durante casi todo el show, y esa es una gran señal, es por lo que uno hace esto.

 


Te entiendo. Mencionabas que tienen audiencias más jóvenes. En México ustedes solían tocar en el Circo Volador, que tiene capacidad de unos 3 mil, pero la vez pasada tocaron en una arena y había como 9 mil personas. Y así es en el resto del mundo, triplicaron sus audiencias.

Claro, y eso es gracias a los ex miembros, no se puede minimizar la magia y el poder que tienen estos personajes. En algún momento tuvieron que dejar la banda, pero es algo que no se explica fácilmente. Por ejemplo, hicimos el Pink Bubbles Go Ape y aún estaban Ingo y Kiske pero la gente no respondió tanto ante el disco. Desde una visión lógica uno pensaría que debió ser un éxito por Michael Kiske aún estaba en la banda ¿cierto? E Ingo, aunque Kai Hansen ya no estaba. Pero son emociones y ellas crean sus propias dinámicas, uno termina por no poder explicar las cosas desde una perspectiva lógica. Pero como dices, hemos triplicado nuestra audiencia porque parece que la mayoría está de acuerdo con lo que hacemos. Puede que haya un pequeño grupo de personas que piensen que no les gusta la idea de las tres guitarras y los dos cantantes, y es algo con lo que nos toca lidiar. Gente que piensa que solo si regresáramos a como eran las cosas en el inicio estarían felices pero nosotros más bien estamos felices de encontrarnos en esta situación donde tanta gente está contenta. No sabemos como explicarlo porque incluso entre nosotros siete no logramos explicar cómo es que esto funciona, es algo mágico. Podemos lograr mucho, siempre y cuando la gente siga contenta con esto, y saberlo es maravilloso. Puedes tratar de analizarlo y explicarlo pero es muy difícil saber qué pasa por la cabeza de los humanos, y especialmente de los mexicanos (risas)

 

Esta foto es de Ralf Lotys (Sicherlich)

La gente ama a Helloween aquí. Pensaba que el más joven entre ustedes es Dani, el baterista, y pensaba que Charlie Watts de los Rolling Stones acaba de cumplir 80 años. La pregunta es ¿cuánto tiempo más crees que podrán seguir adelante? Sobre todo porque el baterista que es el de más desgaste, es joven.

Bueno y Charlie Watts no tiene que tocar todo lo que Dani toca ¿cierto? Dani es como un dinamo, una planta de energía por si mismo. Tendremos que ver hasta dónde podemos seguir y que sea humanamente posible, pero Dani además conoce algunas técnicas para tocar que le ayudan, además siempre está en forma, y es algo que hace por su cuenta, no porque se lo pidamos, es muy estricto consigo mismo y es también estricto con sus opiniones y decisiones de vida, es disciplinado en casi todo, es su forma de ser y eso al final nos beneficia a nosotros como banda. No sé cuánto tiempo podremos hacer esto, somos una banda muy intensa y es difícil así que o tengo idea, pero si te puedo decir que hacemos lo mejor que podemos. Nos estamos haciendo viejos, yo ya no puedo memorizar tantas cosas como antes, los cantantes por ejemplo también han envejecido un poco, ya no recuerdan todas las putas letras así que tienen un monitor que les muestra todas las letras, y ya no es por culpa del jet lag. Es una pregunta interesante, digamos que mientras uno esté saludable y fuerte puede intentar seguir adelante. Para mi fue difícil porque por ejemplo, cuando llegamos a la CDMX al inicio de la gira. Michael Kiske tenía sus cuerdas vocales afectadas por los viajes, tenía algún tipo de inflamación en las cuerdas vocales que agarró en el viaje a la Ciudad de México y yo tenía una gripa horrible que me duró como mes y medio. Y empezó ahí en México y me sentía realmente mal pero debía tocar, y seguí así incluso cuando estuvimos en España, al final de esa primera parte de la gira. Pensé que nunca me recuperaría, cada noche tosía mucho y me sentía realmente mal.

-No se te notaba-

Bueno, en España alguien escribió que me veía 20 años más viejo. Pero eso pasa, es el factor humano. Y luego es normal que todos pasemos por alguna gripa, pero es bueno que no se notara. Es complicado, a veces necesitas correr al baño y no hay baño, son cosas humanas. Y claro, aún así uno trata de hacer el concierto de la mejor manera posible.

 


Sabes cómo la gente percibe a la banda y lo importante que ha sido Helloween para el metal. Tú has tocado con Helloween desde el inicio así que cómo te ves tú a ti mismo. ¿Crees que 40 años después has logrado algo, crees que la gente exagera en cuanto a la banda o que no exageran? ¿Cómo ves a Helloween como su guitarrista por 40 años?

Creo que la banda encontró una dinámica propia y con los conciertos de la última gira se sentía como si hubiera un elemento de divinidad detrás nuestro que ayudó a que las cosas salieran tan bien. De alguna manera diría que somos instrumentos de Dios, te subes al escenario y tratas de generar algo muy positivo y divino en una manera positiva. Nosotros no somos de los que hablan de maldad o Satanás ni le decimos a la gente que maten aquello que no les gusta, no somos una banda extremadamente agresiva ni nada así. Somos una banda con buenas personas, y si quieres creer en Dios o Jesucristo o Buda o Krishna o lo que sea, el punto es que se consideran cosas positivas y eso se transmite. No somos satanistas en busca de destruir a la humanidad o practicantes de la magia negra, para eso hay otras personas. Nosotros estamos mucho más cargados hacia el lado positivo de las cosas y entonces hay veces que estamos los siete en el escenario… una vez Michael Kiske venía saliendo del escenario y me dijo “esto es maravilloso, lo que hacemos es muy importante” y tiene razón, nos toca darle algo positivo a la gente, que vean algo bueno en el escenario. Hay mucha gente que lleva mensajes de maldad y sangre, mensajes que me parece no están al nivel. Drogas cosas que en realidad destruyen a la gente y nosotros tratamos… queremos dar un mensaje positivo. Estamos muy orgullosos porque todos pensamos parecido en ese sentido, no es algo que provoque discusiones y creo que cuando haces bien, algún poder supremo puede estar detrás de ti. Digamos, uno no puede hacer nada como banda si no tienes fans que te poyan y te quieren y quieren ver que te vaya bien. Es como un círculo, ellos quieren que te vaya bien y eso para ellos significará que la van a pasar bien. Es parte de ese factor humano que te decía pero también es un factor mágico porque la música no es algo que puedes agarrar, sale de bocinas a mucho volumen y es como un fuego, no lo puedes agarrar porque te quemas pero el fuego en sí no tienen sustancia, es solo calor concentrado. Bueno, la música y la magia son iguales, no las puedes tocar pero las puedes sentir en tu interior y si el volumen es muy alto vas a vomitar, si no es excesivamente alto lo vas a disfrutar, es una locura pero así lo veo yo. Y cada vez hay más fans del rock en el mundo que van a estos enormes festivales y cada vez más nos invitan a esos festivales. Personalmente por ejemplo yo no podría sentarme en una tienda de campaña y estar alrededor de una fogata con otras personas y escuchar siete u ocho bandas por día, no es lo que yo entendería si me hablas de un día perfecto, pero obviamente lo es para muchas otras personas que lo ven como un escape de sus rutinas diarias y como unas vacaciones con gente que piensa de manera similar a ellos. Yo hago lo mío que es tocar mi guitarra y viajo en camiones y barcos y aviones o lo que sea y de pronto uno se vuelve un poco cínico sobre todo eso, pero es muy importante, y mientras exista la electricidad podremos hacer conciertos, porque sería muy complicado si tratáramos de hacer lo que hacemos con guitarras acústicas. Ya me imagino un show con tres mil personas y que los de atrás te griten que no escuchan un carajo. Es como que uno se acostumbra al lujo de hacer estas cosas que hacemos pero debemos estar conscientes de lo que tenemos y luchar contra los poderes que quieren evitarlo. Porque si uno no es cuidadoso y no se interesa en lo que hace y es cuidadoso con sus hijos y la gente que le importa, al rato no habrá nada. Si adoptamos una actitud de valemadrismo, no habrá mejora para el futuro. Todos tenemos el poder de hacer algo por el bienestar general, y es muy importante. Y te digo esto porque hablamos de México y saben a qué me refiero.

 

Y en México, ya que lo mencionas, a la gente le encanta leer alguna anécdota sobre el país. Buena, mala o como sea pero a la gente le gusta saber cómo perciben los artistas a este país. ¿Qué recuerdas?

Es una pregunta justa, yo siempre pienso que al menos ustedes tienen un gran sentido del humor. Luego escucho la radio y por ejemplo en España me da la impresión de que no tienen mucho sentido del humor, o al menos no saben ponerlo en palabras, no hacen bromas ni hablan en doble sentido pero en México siento que la gente está lista para una buena broma en cualquier momento. En la radio siempre aprovechan la oportunidad de decir algo divertido. A veces solo son dos personas que se juntan para hacer un programa de radio y dicen cualquier cosa, y me gusta. Eso lo he vivido también en Colombia, es algo inherente al lenguaje español, se dicen cosas que no tendrían sentido en el resto del mundo y es una manera de expresarse y jugar con las palabras. Y yo trato de seguir ese juego, cuando alguien me dice “hasta luego”  yo les digo “hasta luegano”, o si me dicen “gracias” les contesto “de nada”. Creo que los mexicanos se esfuerzan por no tomarse a si mismos tan en serio y pasarla bien, a menos claro que alguien trate de romper el buen ambiente, pero cuando se sienten aunque sea tantito felices te salen con cualquier cantidad de bromas y buen humor. Es una habilidad que deberíamos copiar otros. Digo, no se me ocurre alguna anécdota porque estaba, ya sabes, estaba concentrado en hablar de cosas de la banda y eso y me cuesta trabajo ahora mismo recordar algo gracioso en específico, lo siento. Estoy tratando de pensar pero se me escapa, porque sí que hay muchas cosas divertidas que recordar de México.

 Helloween México

Bueno, lo decía porque yo nunca había hablado contigo pero sí tengo una anécdota contigo, en Wacken, aunque no recuerdo el año, La gente te considera muy serio, nunca te ríes pero… (la anécdota en pocas palabras es que un niño como de 10 años se le acercó con miedo para pedirle un autógrafo y Weikath más que eso le hizo todo un dibujo con calabazas. Es más larga pero ese es el punto).

Sí bueno es cierto que no sonrío tanto, soy muy racional y muy lógico pero además es algo con mi boca, los dientes de arriba (es más explicación visual) pero es algo genético que heredé de mi papá, es la forma en que me veo, no puedo hacer mucho al respecto, no soy tan guapo como otros y siempre ando ocupado pensando cosas y si trato de sonreír se ve así (muecas) y no es muy convincente, y luego la gente se pregunta por qué no sonrío pero en realidad estoy sonriendo. Es difícil.

Siempre recuerdo esa anécdota porque los músicos no siempre son receptivos con los fans, y menos con los niños.

Es que no sé realmente qué hacer con los niños, especialmente con los más chicos. Siempre se me ocurre decirles algo del mundo o de Dios pero no a todo el mundo le grada eso. A un niño de 12 años se me puede ocurrir algo que decirle pero más chicos que eso me dan terror, no sé que decirles o qué regalarles. La paternidad no está en mi naturaleza, no me interesa, tengo como una fobia por los niños pero trato de ser amable con todos en la medida de mis posibilidades.

 


Y en cuanto a Helloween, ya me decías que la gente luego se clava en que solo les interesa la época de la alineación original o solo la era Deris, pero con la reunión tomaron la decisión contraria a lo que suele pasar que es correr a alguien para que regrese alguien más. Ustedes decidieron sumar en lugar de correr gente. Es algo distinto.

Y es algo que facilita la vida a los cantantes. Ya de por sí tienen mucho que hacer, uno se imagina que luego de un tiempo se paniquean del trabajo que tienen que hacer, porque es muy demandante. Es como Cantinflas, ¿no crees que alguna vez se habrá preguntado por que chingados quiso ser comediante? Bueno los cantantes son iguales, ahora tocamos más y tendrían que cantar más y seguro querrán que los deje uno en paz, puede ser una pesadilla tener que entretener a la gente todo el tiempo y ser creativo todo el tiempo y dando algo para la gente pero es duro porque no siempre puedes estar en tu mejor punto con la voz, son seres humanos así que a veces ver que terminan bien un show es como un milagro. Pero entonces aquí tenemos tres cantantes y se pueden dividir la carga de trabajo, para ellos es relajante, Deris y Kiske son como una pareja de casados, encontraron a alguien que los apoya en los momentos difíciles y aún así, siendo cantantes de Helloween siempre tienen mucho que hacer, deben recordar las letras y las armonías. Por eso luego es sorprendente que esto funcione, pero funciona, y mientras dure deberían considerarlo una especie de milagro y disfrutarlo, porque nadie sabe cuánto va a durar. Y es que sobre el escenario hace mucho calor y ahora tocamos tres horas, y son tres horas de estrés permanente y debes saber lidiar con eso y al menos hacer las cosas bien para que la gente salga contenta. [Fin de la entrevista].

Bueno, hasta ahí la charla, ya solo queda disfrutar del show. Si llegaste hasta aquí, ¡muchas gracias!


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martes, septiembre 20, 2022

Helloween: entrevista exclusiva con Kai Hansen



En 2021 una de mis chambas era hacerle la prensa a Nuclear Blast en México. Llegar ahí no fue algo que yo persiguiera, simplemente se dio, y que terminara (al menos momentáneamente) tampoco dependió de mi. Lo que sucedió es que una empresa llamada Believe compró la mayoría de acciones de Nuclear Blast (también es dueña mayoritaria de Massacre Records y AFM Records, por ejemplo) y por el momento, no hacen cosas en México. Como sea, durante el tiempo que tuve la oportunidad de trabajarles mediante una agencia mexicana llamada Cobra Management, entre muchos otros lanzamientos ,e tocó el de Helloween. Parte de eso significó que pude entrevistar a Michael Weikath (algo que hicieron varios medios) y a Kai Hansen (esa oportunidad solo la tuve yo, jeje).

La de Weikath la saqué en La Jornada y la de Hansen en Marvin. El caso es que ambas salen editadas por cuestiones de espacio, así que aquí las subiré completas. Debí hacerlo antes pero esto se lleva su tiempo y estamos en una época en que primero debes dedicarle a lo que te genera ingreso, y luego a lo que te gusta, aunque no pague (como este blog, por ejemplo).

Alguna vez conocí a Kai en Circo Volador, en una de esas veces que vino con Gamma Ray. Fumador, bebedor y casanova, el tour manager quería llevar algunas chicas guapas al backstage, sin compromiso. Una de ellas era mi Castañita, Kelpy Interesante jeje, así que yo que tenía acceso al backstage porque trabajaba con Dilemma, ahora podía llevarla a ella porque la invitó el manager. En realidad la idea era hacer una semi fiesta ahí mismo, aunque no dudo que si alguna chava quería, la fiesta podría ser más "personal" jaja. Dicharachero y platicador, en términos de entrevista es un poco más parco. Contesta todo, es muy amable pero no extiende (cuando suba la de Weikath verán a qué me refiero).
Esta foto pertenece a V-Spectrum


Igual es una GRAN leyenda. Yo conocí a Helloween en la parte media de los 80, y si bien no recuerdo el año, si tengo muy presente que el primer disco que tuve de ellos es el EP Judas, mismo que compré en una tienda que en ese tiempo no recuerdo si se llamaba Discos Ser o Rock and Roll Circus. Ninguna existe hoy y como referencia, por si alguien ubicaba el lugar (que la última vez que pasé por ahí era una barbería) era la planta baja de un lugar llamado LUCC (La Última Carcajada de la Cumbancha), que después fue El Telón de Asfalto, un pequeño teatro y que hoy no tengo idea que sea. Fue de mis bandas favoritas en esos años formadores entre los 14 y los 18 años y hoy es una de las que siempre menciono en mi Top 5 de toda la vida.

Bueno, basta de choro, esta es la entrevista completa:

Estaba checando datos y uno que me saltó de inmediato es que este disco de reunión de Helloween será editado por Nuclear Blast. Curiosamente y a pesar de tu trayectoria, nunca habías trabajado con ellos ¿correcto?

Es correcto, de hecho hace algunos años, Markus Staiger, el jefe de Nuclear Blast realmente quería tener a Gamma Ray en su sello, tuvimos algunas rondas de negociación pero al final decidí quedarme con un sello establecido en Hamburgo, sobre todo por una cuestión de amistad entre el tipo que digamos que es el bueno ahí y bueno, me resultaba conveniente. Además creo que me daba algo de miedo que Nuclear Blast tiene tantas bandas en su roster que tal vez Gamma Ray no recibiría la atención que necesitaba. Supongo que estaba equivocado pero bueno, estoy tranquilo.


 

Tú has sido realmente exitoso con GammaRay, pero de alguna manera la gente nunca te olvidó ni a ti ni a Michael Kiske con Helloween. Pasaron 30 años o algo así y están de vuelta y los fans en todo el mundo están emocionados con la reunión. ¿Tú como lo ves, estás emocionado también?

Claro, si no no participaría. Estoy muy contento, sobre todo con lo bien que ha salido todo hasta ahora entre los miembros de la banda. El éxito que hemos logrado es importante también pero lo principal era ver como funcionaba la relación entre los miembros de la banda y hasta ahora ha ido todo muy bien. Estamos muy contentos de estar juntos.

En todo el mundo la gente te ve como el pionero de todo un género del metal, lo que entonces se llamó Power Metal, no el de hoy con teclados y todo eso. Pero la gente te pone a ti específicamente en esa posición, no a la banda, es como estar al nivel de Tony Iommi y Dave Mustaine en el sentido de haber creado un género. ¿Cómo te ves tú mismo? ¿Ves esto como mera anécdota, te la crees?

Por supuesto me siento honrado de que me etiqueten de esa manera, cuando alguien te describe como una persona influyente es algo realmente grande y apreciado como músico así que lo tomo como un gran honor. Ahora, en cuanto a crear un nuevo género, honestamente puedo decir que nunca lo vi de esa manera ni era algo que pretendía hacer, creo que simplemente es la manera en que tocábamos en Helloween y la mezcla de so con nuestras propias influencias se transformó en un sonido propio. Básicamente, el término Power metal en sí es algo con lo que nunca pude relacionarme del todo porque cuando lo inventaron… creo que surgió porque había un sampler, un disco recopilatorio que sacó Noise Records en ese tiempo se llamaba The Power Of Metal y de alguna manera, desde ahí, esto del Power Metal cobró vida, pero desde mi punto de vista siempre fue Heavy Metal. Desde mi perspectiva, lo que hacíamos era Heavy Metal. Recuerdo que le preguntaba a otras personas si podían explicarme qué era Power Metal y me decían: ‘voces agudas, doble bombo y rápido’, entonces yo preguntaba si Deep Purple era Power Metal porque ellos también tenían voces agudas, doble bombo y tocaban rápido, igual Judas Priest, pero eso era llamado Heavy Metal. Entonces yo nunca pude entender el término. Puedo aceptar o entender que se use para definir lo que hacemos, para etiquetarlo de alguna manera así que sí, estoy tranquilo con todo eso.


Al principio de Helloween cantabas y tocabas la guitarra. Llegó Kiske y dejaste de cantar pero te saliste y creaste Gamma Ray donde por algún tiempo volviste a cantar y tocar la guitarra y ahora regresas a Helloween y lo vuelves a hacer. Sin menoscabar la complejidad que debe representar, tú dime, ¿es realmente complicado tocar y cantar al mismo tiempo en una banda como Helloween?

Ok, buen en definitiva es más complicado que solo cantar o solo tocar la guitarra, eso te lo garantizo. A mi me gusta hacer ambas cosas, lo disfruto, pero me resulta más fácil nada más tocar la guitarra. Yo no soy un cantante en el sentido clásico de la palabra, que solo canta, sino que tengo la opción de tocar y cantar al mismo tiempo. Dicho esto, realmente estoy feliz de que en Helloween tengo chance de cantar alunas canciones, cantar y tocar en los conciertos y además tenemos dos grandes cantantes que hacen la mayor parte del trabajo vocal y eso me permite andar corriendo y brincando con la guitarra y disfrutarlo. Y en Gamma Ray simplemente sucedió y yo estaba a gusto con la situación, estaba listo para hacerlo y fueron varios años, aunque tenía que tomar en cuenta las restricciones de ser instrumentista y cantante al mismo tiempo, pero debo admitir que me gusta vivir el estilo de vida del rock and roll, no soy el tipo que después del concierto se va directo a su cuarto de Hotel y espera con calma a que salga el siguiente vuelo, a mi me gusta ir al bar y tomarme algunos tragos. Nunca pude dejar de fumar por ejemplo así que digamos que no soy ese tipo de persona que es un cantante perfecto y un frontman perfecto, pero soy gritón y de repente me gusta expresarme como cantante, lo disfruto. Ahora tengo chance de cantar con los otros dos y estoy muy agradecido por ello.

Helloween y Gamma Ray son bandas que siempre tuvieron más de un compositor, pero ahora son un septeto y creo que seis de ustedes componen. Con eso en mente, ¿cómo es el proceso de escribir música con tantos escritores?

Bueno nos ofrece la oportunidad de tener mucha diversidad. Por supuesto es un reto porque cada compositor tiene su propio estilo y el reto es juntar todo eso y hacer que suene como la banda. Yo creo que no es un problema porque todos hemos superado esa idea de competencia en la que cada compositor quiere tener más canciones en el disco o que todo debe ser dividido de manera igualitaria. Para nosotros solo importa si la canción es buena o no, si es lo que se necesita para el disco así que estamos relajados en ese aspecto. Logrando eso es posible disfrutar el hecho de que muchas personas escriban.

 

Esta foto pertenece a Noriu

Con todo respeto para ellos, Iron Maiden con tres guitarras no tiene mucho sentido, para mí, y menos en vivo porque tienes a dos guitarristas que tocan y a otro que hace ejercicios en el escenario (se ríe), pero con Helloween… (interrumpe)

Sí, creo que Janick exagera con lo de hacer ejercicios pero por otra parte, esto de tener tres guitarras ofrece una nueva dimensión para crear sonidos y en Helloween tiene mucho sentido porque tenemos tres muy buenos guitarristas que tenemos la habilidad de complementar a los demás. Y por supuesto todo lo que hacemos podría ser tocado con solo dos guitarristas pero yo si veo un gran beneficio en tener a los tres y hacerlo juntos, porque ese es el punto, a mi me encanta.

Claro, y es que cuando está uno en el público se puede distinguir que son tres guitarras, es interesante y me hizo pensar que todos ustedes en el frente de la banda podían seguir tocando aunque no sean tan jóvenes, pero se necesita un baterista que esté en muy buena forma, no importa la edad pero sí que esté en buena condición física.

Es cierto

¿Hace alguna diferencia tener a alguien como Dany ahí atrás?

Sí importa. Digo, no importa quien lo haga y qué edad tenga pero con este tipo de música definitivamente necesitas un baterista que esté en forma y que en el aspecto físico y de salud sea capaz de soportar la masacre que es la batería en una banda como Helloween por todo el tiempo que dura el concierto. Honestamente jamás cambiaría de posición con él, ser el baterista es un trabajo muy demandante y por eso le tengo respeto absoluto a Dany, hace un trabajo muy cabrón. Es un trabajo que sería un enorme reto para cualquiera.

 


Los comunicados de prensa suelen traer eso de que la gente espera la vibra de los Keeper of the Seven Keys, pero nunca lo explican. Tú que estuviste ahí y que escribiste buena parte de esos discos, ¿podrías definir cuál es la vibra de los Keeper?

Dios mío, eso es realmente difícil de definir. Definitivamente hay cierta vibra en los Keeper y creo que hay mucho de esa vibra en este disco pero no podemos olvidar que Helloween ha estado activo por mucho tiempo, y han sido muchos años desde que se hicieron los Keepers, y han hecho grandes discos que la gente ama. Claro que de vez en cuando hay controversias entre los fans porque algunos prefieren la era con Andi, otros prefieren la era del Walls Of Jericho y hay gente que prefiere la era de los Keeper y eso provoca que repente no puedas hacer totalmente felices a todos, pero de cualquier manera parece que hasta ahora, con este disco, hemos logrado que casi todos estén contentos. Digo, es obvio que la gente tendrá sus momentos favoritos, sus canciones favoritas o tal estilo de Helloween como su favorito pero creo que en general logramos satisfacer las necesidades del fan promedio de la banda así que por lo pronto yo estoy muy contento de que la recepción que ha tenido el disco entre quienes lo han escuchado ha sido tan positiva.

 


Una cosa curiosa contigo es que cuando estabas en Gamma Ray, la gente te extrañaba en Helloween y ahora, hay quienes extrañan a Gamma Ray. En ese tiempo que pasaste en Gamma Ray ¿estabas al tanto de lo que hacía Helloween? Porque sé que ahora debes tocar algunas canciones de la etapa Andi.

Sí, claro, los he seguido, estaba al tanto y si bien no escuché todos sus discos de la A a la Z siempre estuve interesado en lo que hacían, en su carrera. Realmente no tengo problema en tocar canciones de esa etapa porque son buenas.

 

Con el regreso tuyo y de Kiske a la banda se triplicó la audiencia. En México siempre tocaron en el Circo Volador, de 3 mil lugares y ahora tocan en una Arena para más de 10 mil. ¿Lo veías venir?

Bueno no podía calcular la reacción, sí me imaginaba que serían audiencias más grandes por la unión de fuerzas entre nosotros y porque se juntarían más tipos de fans pero al final logramos algo que ni Helloween ni Gamma Ray podrían haber logrado por sí mismos. Entonces, sí esperaba algo grande pero la realidad superó mi expectativa.


¿Qué escuchas en la actualidad? Pareces el tipo de músico que está al tanto de lo que pasa y que por ahí escucha algo de metal actual. ¿Es correcto?

Escucho casi de todo. Hay algunos géneros que no son mis favoritos pero de entrada mis clásicos y mis influencias nunca han dejado de formar parte de lo que escucho pero si mantengo los ojos abiertos y en ocasiones hay alguna que otra banda que me engancha. Recientemente Beastin Black, antes de ellos descubrí a Sonic Syndicate que me gusta mucho y algunas más. No me preguntes nombres porque soy malísimo y son tantas que se me olvidan pero claro, siempre hay algo nuevo para descubrir y engancharse con ello y es lo que hace que la escena siga adelante. 

Cuando escuché Skyfall y vi el video con el extraterrestre y todo el tema, pensaba en Ace Frehley, que se suponía vino del espacio y es que en ese tiempo hablar de eso era de locos, pero ahora con tanto avistamiento ya no lo es. ¿Tú tienes alguna anécdota de haber visto ovnis o algo o simplemente se te ocurrió hablar del tema?

Digamos que he visto cosas en el cielo que no he podido explicar. Nunca he tenido un encuentro cercano, desafortunadamente a mí no me ha pasado, pero sí he visto algunos fenómenos extraños en el cielo nocturno, me pasó en Hawai por ejemplo, también en Eslovaquia, cosas que uno entiende como fenómenos muy extraños, definitivamente no eran satélites ni aviones ni cosas que yo pudiera explicar así que pienso que tal vez podría haber sido algún tipo de nave extraterrestre. Fenómenos raros. Y por supuesto no me atrevería a decir que tengo la verdad ni tampoco estoy 100% seguro de que los extraterrestres en verdad existan pero ciertamente es posible. Al final del día cada quien decide por sí mismo pero a mi fascina la idea.

 


Bueno, esto no tiene nada que ver con la entrevista pero en mil novecientos noventa y algo fui a un concierto enorme de Pink Floyd y miles vimos algo raro en el cielo y pensamos que tal vez los extraterrestres querían ver a la banda.

Jajaja eso sería entendible porque Pink Floyd es maravilloso.

Sí. Pero la idea es que incluso con Skyfall, el mensaje no es negativo. No diría que hay bandas que impulsan alguna agenda de destrucción pero hay muchas que hablan de cosas negativas, y lo entiendo y me gusta pero Helloween nunca fue así. Siempre han mantenido una idea positiva, letras positivas. ¿Escriben letras sobre cosas positivas de manera consciente?

Bueno creo que si te fijas en las letras que escribo yo o incluso lo que escriben otros en Helloween verás que hay cosas negativas también, o cosas crípticas en el sentido de que el mundo se está yendo al carajo y es nuestra culpa. Creo que es un tema recurrente porque es muy real, aunque sí es cierto que siempre nos las arreglamos para ponerlo en un concepto en el cual siempre exista algo positivo, no queremos quedar atrapados en la depresión ni que la gente que nos escucha se quede ahí en la depresión, no hace falta insistirles en que el mundo apesta. Creo que tratamos de expresar nuestra ira de manera humorística o no tan seria.

Y es que una cosa es hablar de Satanás y lo malo y otra muy distinta es querer matar a todo el mundo.

Exacto, y nosotros nunca hemos tenido esa intención. Yo recuerdo cuando surgió Venom, yo compré su disco por la imagen de la cruz invertida y el 666 y todo eso porque me encantaba el concepto. Además nunca fui gran fan de la religión ni de la iglesia porque en general no me gusta el dogma así que me encantaba esa parte rebelde que tenía toda esa imaginería. Creo que es válido y estaba bueno pero cuando la gente se lo empieza a tomar muy en serio y cree que así es como deben ser las cosas, bueno, yo creo que no. Para mí es más bien como una especie de broma rebelde, pero nada más.


¿Cuáles son tus expectativas con el disco?

Pues en realidad mi manera de entender las cosas es no generarme expectativas de ningún tipo. Sí siento que el disco es bueno, incluso diría que muy bueno y me hace muy feliz saber que hasta ahora a la gente le ha gustado pero no espero nada, solo dejo que las cosas sucedan y mientras hago lo que me gusta.


 

Si te digo México, ¿qué se te viene a la mente?

Bueno lo primero que pienso cuando sé que voy a tocar en México es la botella y la máscara de oxígeno que tenemos en el backstage. La altura de verdad pesa, no estamos acostumbrados así que eso recuerdo, estar pegado a esa botella cada vez que se puede jaja. Y lo he platicado con gente de otras bandas y cuando llega el solo de batería es un gran alivio porque sabes que podrás ir por un poco de oxígeno.

 

Y tener otros dos cantantes también ayuda ¿no?

Definitivamente, para mí es perfecto porque la chamba real la hacen los otros dos y yo solo aparezco por mis cinco minutos de fama y puedo dar el 200 por ciento sin agotarme. Muy conveniente en verdad.

 


¿Gira con HammerFall en México?

Bueno no sé si sería con ellos pero sí sé que Helloween irá a México, eso es un hecho. Fin de la entrevista con kai Hansen.


Pues resultó que siempre sí fue con hammerFall, excelente opción de banda invitada. Y bueno, si llegaste hasta aquí, ¡qué aguante! pero muchas gracias.


Migraña en "de mi Top 5 de la historia" mode on.


viernes, septiembre 09, 2022

Iron Maiden y el concierto del ¡por fin!

Iron Maiden

Por Luis Jasso

#SangredeMetal


 

Algo me dice que esta reseña, al igual que el concierto de Maiden, irá de menos a más. Y es que al hacerla entran en juego varias situaciones. La primera y más obvia es el concierto en sí mismo, pero otras variables son lo vivido en Candelabrum, sobre todo desde la perspectiva de ser uno de los primeros shows grandes que me tocó vivir post pandemia. Otros son un par de frases que me dijo Athenar, de Midnight, en entrevista: “el metal no debe ser música de adultos” y su descripción de los zombies de Iron Maiden -y también de Kiss, yo me llevé igual mi raspón, jaja.

 


Otra cosa importante es que esta y cualquier reseña está escrita desde mi perspectiva personal, y por esa razón siempre será subjetiva. No existen las reseñas objetivas, todas van salpicadas de subjetividad, y esta por supuesto no será le excepción. Además, también influyen el estado de ánimo, el lugar que ocupabas en el concierto y varias variables más. Y una vez más, al ser un blog y no un espacio formalmente periodístico, me daré la libertad de escribir en primera persona.

Y con todo eso en mente, lo primero que quiero escribir es ¡bendito sea el pasado de Iron Maiden!

Si tomamos en cuenta “Doctor Doctor” como parte formal de un concierto de Maiden, entonces fue un show casi perfecto en cuanto a puntualidad. La rolota de UFO comenzó a sonar a las 9:05 de la noche y la banda estaba anunciada a las 9. Bien ahí. Pero justo es la parte menos del show. Esa canción, más allá de la canción misma representa el momento en que empieza a fluir la adrenalina, la expectación. Es como un boxeador que usa una canción x para motivarse y estar con la sangre caliente antes de empezar su pelea. Pero en este caso, el boxeador arranca con la adrenalina a tope, con la expectativa a tope y llega la banda y lo hunde todo con tres temas del aburridísimo Senjutsu. Dr Dr deja el plato bien caliente y Maiden lo enfría además con una rola de inicio (“Senjutsu”) con una de esas intros de flojera que tanto les gustan de 25 años para acá, para ocho minutos y feria más tarde seguirlo con “Stratego”. Terrible.

 


Más adelante, Dickinson dijo que había 65 mil personas (ya llegaremos a ese punto) y yo calculo, con toda honestidad, que por lo menos unos 40 mil de esos estaban callados y distraídos con las dos primeras rolas. Se notaba, se escuchaba. Incluso los fans más aferrados saben en el fondo de su corazón maidenesco que el inicio fue tenso, callado, frío. “The Writing on the Wall” levantó un poco el ánimo, pero según mi interpretación más porque el tema fue video-sencillo y lo conocía más gente. Muchos cantaron emocionados el primer verso pero en el resto de los poco más de seis minutos, reinó la incómoda apatía.

Pero hasta ahí llegó. A partir de ese punto arrancó el bendito pasado de la banda, y si bien no todas las canciones que siguieron me parecen fantásticas, creo que eligieron una buena mezcla de rolas conocidas, éxitos y clásicos inmortales.

Este concierto fue muy cargado hacia Piece of Mind y The Number of the Beast. En mi libro, nada que reprochar. Y aquí vale una aclaración importante. Yo sentí el inicio flojo y desangelado, podía hablar con Kelpy Interesante o con Yaya Maiden sin gritar y eso era porque el ambiente aún no explotaba, pero la banda, desde el inicio, nos vendió una actitud que hace muchísimos años no mostraba. Eso y el pasado glorioso se juntaron para que a partir de “Revelations”, la intensidad no decayera ni un gramo más. “Blood Brothers” me da lo mismo, pero a la mayoría del público le encanta, eso se transmite y entonces hasta la disfrutas. Y vuelvo con la actitud. No recuerdo haber visto a la banda con tanto ánimo sobre el escenario. Siempre hay dos o tres que están prendidos y dos o tres que andan con cara de flojera. Bueno, esta vez, los seis estaban totalmente enganchados.

 


Dickinson ya no es el mismo cantante pero, con esa edad, ¿quién lo es? Y ojo, tampoco es que ya no cante, es solo que ya no canta igual y ahora usa mucho más algunos efectos, sobre todo ese que dobla la voz, algo que, por ejemplo y para que no parezca odio gratuito, hace mucho Rob Halford. Es anotación, no crítica. Después tocaron “The Signo f the Cross”, buen tema de la era Blaze que no tocaban hace 17 años. Regresaron al Piece con la gloriosa “Flight of Icarus, y si bien la enorme figura de Icaro con sus alas desplegadas viene desde la gira pasada, no importa, luce impresionante.


Y aquí es buen momento para destacar un punto que yo he criticado mucho durante varios años. La noche del miércoles, por alguna razón, Janick Gers dedicó cerca del 85% del tiempo a tocar la guitarra. Todas las giras anteriores con tres guitarristas lo que hacía era jugar a Jane Fonda 85% del tiempo y tocar 15%. Ahora, en lugar de hacer malabares con la guitarra, brincar y hacer cardio, toó. Y lo hizo sonriendo, además. Y otro punto a destacar, y que también los fans más clavados, en la tranquilidad de sus conversaciones internas podrían aceptar, es que su inge ¡por fin! hizo un trabajo decente. Nada espectacular pero muy superior a los años recientes. ¿Y eso que significa? que cuando Gers y Smith (normalmente) tocaban una melodía al mismo tiempo para poner una cama sonora a los excelsos solos de Dave Murray, se escuchaban las dos putas guitarras. Y perdón por la cuatroletras pero ya era ridículo verlo ahí, sin tocar nada. Yo no sé si hablaron, si alguien les dijo que hacían el ridículo cada gira, si vieron a Helloween en vivo o qué diablos pasó, pero Gers tocó la guitarra, incluso algunos solos de rolas que no fueron de su época, sonriente, aplicado. ¡Carajo! Más de 20 años para que la banda se dejara de fregaderas e hiciera sonar sus tres guitarras.

 


“Fear of the Dark” no tiene desperdicio. A muchos fans clavados no les gusta tanto, pero en vivo funciona de maravilla, y si a eso le sumamos que la banda estaba entregada, y el público estaba extasiado, pues ni modo de no corearla.

Y regreso a los 65 mil. La cifra la dictó Bruce. “En Sao Paulo tuvimos 63 mil personas, pero no se preocupen, ustedes se llevan el premio, aquí, con 65 mil personas, tenemos el show más grande de la gira” (palabras más, palabras menos). Probablemente ese dato es el que los tenía tan contentos y enchufados, porque Dickinson es un gran “frontman”, pero no siempre se le nota cómodo más allá del personaje de líder de la banda. Bueno, en esta ocasión parecía genuinamente entregado y contento. Lo mismo Nicko McBrain. A él es al que aparentemente más le pesa la edad. Las rolas son un poco más lentas para acomodar su capacidad física, pero eso ha terminado por ser algo bueno, o por lo menos no algo malo, porque además de que la mezcla de sonido fue bastante buena, con la reducción de velocidad en las rolas llega la ventaja de que cada “fill” o “redoble” en los toms, se escucha perfecto. Cada golpe cuenta y cada uno suena.

 


“Hallowed be Thy Name”, “The Number of the Beast” y “Iron Maiden” cerraron el show, y claro, el público ahora sí sonaba como si estuviera constituido por 65 mil personas.

El primer encore fue con “The Trooper”, con bandera mexicana incluida, “The Clansman”, la otra de la era Blaze que si bien me parece más x que espectacular, funciona muy bien en vivo por la incansable repetición del coro y la magistral “Run to the Hills”. Para ese momento, Bruce había peleado a espadazos con Eddie, le había disparado en “The Trooper” y si bien corrió menos (si entiendo bien, tuvo una caída en Brasil y eso podría haber mermado su tradicional hiperactividad), debo insistir en que se veía genuinamente contento. Todos, pero en él se notaba más porque suele ser más frío. Habló con la gente en momentos clave para presentar ciertas rolas, pero también lo hizo para agradecer y entrar en comunicación. Ellos de buenas, nosotros también, no es tan difícil de entender, pero les llevó décadas lograrlo.

 



El segundo encore fue con “Aces High”. Habrá quienes hubieran preferido otra, pero esta funciona muy bien porque sacan a pasear el avión de guerra inflable que tienen y que la verdad luce mucho.

Yo pensé que ya nunca viviría un show de Maiden así de emocionante. Más allá del aburrimiento del principio, lo demás, sin quejas. Y vaya que sacar discos es encomiable, pero regreso al inicio y la frase de que el metal no debería ser música de adultos, y tristemente, Maiden lleva casi 30 años de pensar justamente al revés. Esas tres canciones del inicio son la representación gráfica del dicho de Paul Stanley que dice que Kiss ya no saca música nueva porque entonces la gente va a los conciertos y meramente tolera el material nuevo. No tiene razón a raja tabla, pero Maiden ejemplifica eso a la perfección, sus rolas nuevas, excepto las del disco anterior a este, meramente se toleran, pero la culpa es de ellos y nadie más. No me quiero imaginar la pesadilla que será si cumplen con la idea de tocar todo Senjutso en su próxima gira.

 


En fin, una noche muy agradable, un ¡por fin! que por lo menos a mi en relación con Maiden, me hacía mucha falta. Además, ver la lagrimita de Kelpy Interesante en "Iron Maiden" y "Run to the Hills" no tuvo precio. 

 

Punto y aparte son los precios increíblemente excesivos de la merca oficial, pero esa es una mancha que se resuelve si no se le pone atención.

Ya para acabar, por culpa de un mal cálculo a la hora de salir (hicimos 19 minutos de la zona de metro Constitución a la esquina de Añil y Churubusco, o para ubicar, la esquina donde está la pantalla exterior del Palacio) y luego hicimos 24 minutos de la esquina de la lateral de Viaducto a la Puerta 1. In creíble. Y por eso no vi a Mastodon, ni una rola, y vaya que es una gran banda, pero esa la razón por la cual ni los menciono. No los vi.


Si llegaste hasta acá, muchas gracias.

 

Migraña en “we’re blood brothers” mode on. A ver cuánto me dura, jaja.


**Todas las fotos son del gran César Vicuña, cortesía de Ocesa.