martes, diciembre 03, 2019

Knotfest se encuentra con Force Fest: opinión.


Tenía mucho que decir y luego no tanto. Quise ser objetivo pero igual no lo logré. Cometí el error de leer lo de mucha gente pero afortunadamente, como este mismo texto lo indica, tengo mi propia opinión, a pesar de que sea o no popular. No odio a nadie y no me gusta ver que Live Talent se tropiece cada vez con la misma piedra, o con una parecida a la anterior, pero si vas a escribir algo, pues tampoco vas a lambisconear o mentir, para eso ya hay un puñado de "influencers" ¿no?
La guerra sucia contra Monterrey fue una de las peores ideas que han existido en el entorno de LT, sobre todo porque el festival norteño fue un éxito y porque, de así quererlo, cada festival de metal podría tener su nicho y su tiempo.

Esta es mi opinión, y si después algo cambia en mi, pues cambia y listo. Hoy...

Dice la RAE que polarizar significa, entre otras cosas, “concentrar la atención o el ánimo en algo” y “orientar en dos direcciones contrapuestas”. Por diversas razones, Live Talent tiene ya desde hace algunos años, una tendencia a polarizar opiniones sobre sus conciertos. Con suerte, al final de este texto, cada quien podrá sus propias conclusiones. Estas son meramente las mías (Luis Jasso, Chico Migraña).
Así pues, ¿qué pasó en Knotfest meets Force Fest (o en español, Knotfest se encuentra con Force Fest)? Ojalá hubiera una respuesta concreta y contundente. Desde mi perspectiva, no es tan fácil.
Primero que nada, hay que considerar ahora sí con firmeza el entorno. Si hay algo que no me cuadra es el culpar a la gente, y antes de que se desespere nadie, aclaro que esta idea no es y no será un esfuerzo por defender a quienes vandalizaron el escenario. Lo que hicieron ese puñado de pseudo metaleros no tiene justificación, pero es en todo caso la última gota en un vaso que se derramó poco a poco. Tampoco estoy a favor de esa gente que usa sus redes sociales para pedir perdón al mundo por lo que pasó en México, como si no hubiera sucedido antes en algunos de los festivales más famosos del planeta; los que usan sus redes para rasgarse las vestiduras y decir que “nunca más querrán venir bandas internacionales a México”. Y este es gran parte del problema: las redes sociales, su utilización sin ningún filtro para decir cualquier estupidez y lo peor, cuando las usan promotores para que ciertos personajes, el sabor del día o de la época, “ayuden” a difundir.
En una conferencia de prensa que se llevó a cabo el domingo, previo al arranque del Force Fest, Live Talent, por medio de su Director General, Javier Castañeda, hizo varias declaraciones que pueden orientar al que quiera hacerlo, sobre lo sucedido. Probablemente sin quererlo, él mismo destapó algunas de las limitantes que llevaron al caos. Para no confundir a nadie, pero también para no faltar a la ética más básica, no usaré comillas al referirme a sus dichos porque no serán textuales, así que seré redundante en aclarar cuando lo escrito sea lo dicho por él y cuando sea mi opinión.
Primero entonces. Más allá de la sana competencia, esa que al final del día nos debe beneficiar a nosotros como público, hay un fenómeno que ha sido muy identificado con Live Talent, y es el uso de “personalidades” para promover sus conciertos. Este año enfocaron sus baterías a polarizar a la gente en contra del festival (maravilloso en su concepción, desarrollo y culminación, por cierto) denominado México Metal Fest, que se llevó a cabo en Monterrey.
Alguna vez un directivo de Live Talent me dijo que no fue intencional poner su fin de semana metalero el mismo día que lo hizo Monterrey, que había anunciado su fecha con muchos meses de antelación. Si es cierto o no sólo lo sabe él. El veredicto en las autoritarias redes sociales es que fue una acción deliberada, dicho que se sustenta además con los hechos del 2018, año en que, también, Live Talent puso su Force Fest el mismo fin de semana que el México Metal Fest. Eso, sin embargo, como quedó demostrado con el Sold Out norteño, fue más anécdota. El problema ahí fue que algunos “personajes” y “medios” decidieron hacer campaña de desprestigio contra el festival regio, y en favor de los festivales capitalinos. El descaro fue tal que no habrá poder humano que convenza a la mayoría del ciber mundo de que no se trató de algo pagado. Es decir, que ciertas páginas tenían la consigna de atacar al otro festival a cambio de un salario. ¿Por qué es importante todo esto? Porque una vez polarizada la gente, si algo sale bien (MxMFIV por ejemplo) será reconocido y destacado, pero si algo sale mal (Knotfest), el efecto búmeran hará que los reclamos sean mucho más duros, que las reacciones se tornen mucho más radicales y que algunos con alma de simio saquen su frustración como orangutanes enjaulados. Y justo así sucedió, toda la carga negativa de las redes salió a colación en los momentos de mayor tensión,
Yo estuve en Knotfest.
Estuve ahí cerca de dos horas y media porque fui a recoger mi acreditación. No me interesaba prácticamente nada del cartel del sábado y tenía un problema en la espalda que me impedía estar de pie por largos periodos de tiempo, así que me dediqué a recorrer el lugar y crearme una idea de cómo estaría el domingo.
Honestamente, a esa hora, entre las 3:30 y las 6:30, no había ningún problema. El Deportivo es enorme, lo cual facilitaba que los escenarios no se empalmaran en cuanto al sonido. Sí, cuando llegué, me pareció curiosa la ubicación del escenario principal porque se notaba el puente vehicular desde el cual más tarde algunas personas verían a algunas bandas. Obviamente no tenía idea de lo que pasaría más tarde así que no me fui a ver si la valla aguantaría o no, pero si noté, y no tengo por qué mentir, que no era una valla reforzada. Tampoco había los llamados rompeolas, esas estructuras de barricada que dividen a la gente de una zona (preferente por ejemplo) en dos grupos hacia la izquierda y la derecha. Es decir, si miras de frente el escenario, la barricada de enfrente sería como la parte horizontal de una letra T, y los rompeolas normalmente salen desde ahí hacia la consola, lo que sería la parte vertical de esa misma T. Eso se pone para evitar justamente que las aglomeraciones de gente sean peligrosas. Luego, porque en la mayoría de los masivos en México sucede, contrario a lo que algunos dicen en las redes, estaba la división entre preferente y general. Es decir, que se divida al público entre pudiente y jodido está mal, pero es práctica común, lo hacen en el Corona, el Vive Latino, los festivales de Ska, de Reggaeton, de Banda, Punchis, Salsa… en todos. Normalmente, y quien haya estado en general en algún masivo en el Foro Sol por ejemplo lo sabrá, esa barricada es doble y reforzada. Es decir, hay dos hileras de barricada que forman un pasillo en el cual normalmente hay personal de seguridad. A la hora que yo estuve ahí, que fue durante tres canciones de la banda llamada Carajo, no había más de 3 o 4 elementos de seguridad en la barricada. Eso podemos achacarlo directo al organizador, y se lo preguntaron a Javier en la conferencia de prensa (no tan detallado, le preguntaron si no creía que faltó seguridad).
Su respuesta fue que las autoridades te exigen cubrir ciertos criterios de seguridad y tener cierto número de personas dedicadas a eso, y que cumplieron con ello.
Yo no lo dudo, pero si dudo que las autoridades sepan cómo funcionan los conciertos. Es decir, a Live Talent le falló el cálculo. Por ahí dicen que se quisieron ahorrar una lana. Bueno, eso no lo sé, pero todo esto que menciono es algo que ya deberían saber luego de haber hecho conciertos masivos desde hace varios años, y más si su estimado de gente el sábado era de 50 mil personas. A estas alturas del partido, ya no se justifica de ninguna manera que sus barricadas no sean reforzadas y que no haya elementos de seguridad suficientes para mostrar presencia. Si no hay seguridad visible, sólo hace falta que una persona se envalentone y haga algo que no debería hacer para que en instantes se le sumen otros, y eso pasó.
Según Castañeda, cuando supieron que se había roto una parte de la barricada, en lugar de hacerse de la vista gorda decidieron compartir la información con la gente de Evanescence y Slipknot. Enterados del fallo, las bandas decidieron esperar a que se corrigiera el problema. Cuando vieron que se iban a tardar más de lo esperado, él decidió que se le hablara al público desde el escenario para hacerles saber del problema, pero el dueño del audio no quiso facilitar un micrófono (sic). Y ojo, como ya dije antes, estas son palabras de él, no interpretaciones mías. Presionado por alguna reportera sobre el nombre de la empresa de audio, cambió un poco su dicho y aclaró que de todos modos, la gente de Slipknot le dijo que no era buena idea hacerlo.
Ok, mi opinión es que si el dueño del audio no te quiere abrir un micrófono, lo mandas al diablo porque le estás pagando.
Más adelante en la conferencia se habló de los ya famosos “grupos de choque previamente identificados”, que es algo que estaba escrito en uno de sus boletines de prensa. En ese caso dijo que aunque sabían quienes eran y los tenían detectados, prefirieron no enfrentarlos para no generar violencia.
Mi opinión es que si los tienes identificados, los sacas del inmueble con apoyo de tu seguridad, que finalmente para eso está. El problema, creo, es que no había seguridad suficiente.
Como sea, aquí abajo está la liga a un video con la mayor parte de esa conferencia para que cada quien la escuche y saque sus conclusiones.
También es cierto que muchos “medios” (volvemos a lo nefastas que pueden ser las redes) replicaron irresponsable y falsamente alguna información que hablaba de heridos, gente con fracturas expuestas y hasta muertos, Nada de eso sucedió.
Honestamente, porque lo conozco a él y conozco a varias personas que trabajan ahí, lo que me queda claro es que no hacen las cosas mal por joder a nadie. Creo que en el caso de Javier, que es y siempre ha sido la cabeza visible de la empresa, el problema mayor es la soberbia. Y ojo, yo pasé por ahí también hace muchos años, cuando este blog era muy popular, así que sé de lo que hablo.
Desde mi óptica, Live Talent tiene con qué ser una competencia real en el mercado metalero, pero su energía está mal encausada. Al ver el video queda claro que el gran problema es no asumir responsabilidades, creer que todo es culpa de alguien más, crear y creer teorías de la conspiración que, si bien en algunos casos puntuales pueden ser ciertas, también son parte del negocio.
Los comunicados de las bandas que sí tocaron coinciden todos en que la logística fue mala y el audio en los escenarios, pésimo, y eso, aquí y en china, es responsabilidad del promotor. Estos son fragmentos reales publicados por algunas bandas en sus redes oficiales:
Behemoth, a través de Nergal, hizo un chiste sobre el disturbio final y se hizo viral la frase de “luego de ver Machete me quedó claro que no debes meterte con mexicanos encabronados”. Sin embargo, antes de esa frase célebre, calificó la logística en el escenario como un caos: “Ya no me quejaré del caos técnico que privó en el escenario antes y durante nuestra presentación, ¡porque al menos pudimos tocar!”. Ellos tocaron en el escenario principal, que es el que después tuvo todos los problemas.
W.A.S.P. expresó lo siguiente: “La planeación de este concierto se llevó meses y contaba con el apoyo visual del video. Justo antes del concierto nos fue informado que no podríamos usar video. El mayor problema de la noche fue que mientras la banda estaba en el escenario, la electricidad que alimentaba el escenario constantemente se sobrecargaba y se volaba. Eso sucedió cuatro veces, pero tras la cuarta ocasión se nos informó que ya no tenía arreglo”. Ellos tocaron en el llamado Tecate Stage, pero abreviaron su set debido a la falta de energía.
En ese mismo escenario, horas antes, durante su presentación, el cantante de Of Mice and Men comentó en al menos tres ocasiones que agradecía la entrega del público, a pesar de la serie de problemas técnicos que vivían ellos en el escenario.
En el Force Fest, desde el escenario, Steve Souza de Exodus pidió aplausos para el staff técnico de Rob Zombie, porque “si no hubiera sido por ellos, este escenario no hubiera podido funcionar”. In Flames también hizo comentarios similares.
¿Qué significa todo esto? Que la parte técnica fue un caos y, tristemente, un retroceso para Live Talent, porque lo realmente destacable del Force de Teotihuacán había sido la impecable calidad del audio en todos los escenarios.
Entonces, si no hay autocrítica, no hay avance. Si todo es culpa de todos menos de uno mismo que es el responsable, difícilmente habrá un crecimiento. Si la empresa se empeña en hacer lo justo necesario, el primer problemita se va a convertir en un caos.
De lo más triste, para mí, es la cancelación de las bandas nacionales sin explicación alguna. En la conferencia, Castañeda ofrece disculpas a las bandas y justifica las cancelaciones por un asunto de estrés y ansiedad por hacer que, al menos, las bandas internacionales tocaran. El problema es y ha sido que, sin poder asegurarlo porque no estoy dentro de su cabeza ni la de la gente que lo rodea, la actitud parece ser tipo “las bandas nacionales son un mal necesario”, cuando no es así. Y lo comento porque se lo dije en persona a uno de sus más cercanos colaboradores, el año pasado: “tener bandas nacionales no es a fuerza, pero si las vas a invitar, entonces debes tratarlas con respeto”. Sabemos que por lo menos Mákina, Next, Jet Jaguar, Obesity y Tamadre ya no tocaron en el Force, que estuvieron ahí desde temprano y que no hubo nadie que les explicara nada. De esos cinco, sólo Mákina no hizo comunicado oficial, los otros cuatro los puedes ver aquí, aquí, aquí y aquí, respectivamente. También, de acuerdo a un comunicado oficial, Kaizan se presentó ante veinte personas porque los obligaron a tocar cuando aún no se abrían las puertas: “gracias infinitas a los asistentes que de alguna forma lograron entrar y vieron nuestro set -que nos recortaron- (hicieron magia porque la mayoría de las personas siguen esperando lograrlo y no abren las puertas o les dan acceso)”.
Here Comes The Kraken también tuvo sus problemas. El manager, Andrei Pulver, comentó lo siguiente: “Quiero hacer público que durante la presentación de Here comes the Kraken los elementos de seguridad de la empresa Cóndores decidieron que no iban proteger al vocalista de la banda por lo cual tuve que bajarme del escenario a hacerlo yo mismo”.
Y en este punto también es importante destacar que algunos de los grandes promotores (paleros en algunos casos) del Knot meets Force son páginas o medios que históricamente agreden a las bandas nacionales, se burlan de ellas y las minimizan, lo cual es en todo caso una muestra de que no se les tiene por gusto (excepto algunas que tocan casi siempre con ellos) sino por conveniencia. Y el público no se queda atrás, porque ya que ven al caballo muerto, entonces lo patean. Es decir, cientos de los comentarios en favor de las bandas nacionales son solamente subirse al tren del mame, porque cuando esas mismas bandas tocan en escenarios no tan grandes, el 90% de esos que tanto dicen apoyar, no sólo no apoyan sino que minimizan, denigran y agreden.
En fin. Sabemos que Evanescence y Slipknot estaban en México. Entendemos que lo de la barricada puede suceder, pero sabemos también que lo que falló fue la capacidad de respuesta ante un problema que debió haberse previsto. Tristemente, no es la primera vez y, por el contrario, es el pan nuestro de cada día en estos eventos: siempre pasa algo, pero siempre es culpa de alguien más. Los delincuentes que quemaron cosas podrían ser identificados porque hay fotos y videos, mínimo se debería buscar acción penal contra ellos. Y si eran un grupo de choque ya identificado, con más razón. Como se puede escuchar en la conferencia, esos daños los asumirá un seguro que se contrata siempre en este tipo de conciertos masivos.
¿Habrá Hell and Heaven? Yo imagino que sí, hay mucho dinero de por medio. El Oceanía está en zona ruda, es cierto, pero también lo está el Palacio. El punto es en todo caso reforzar (triplicar o cuadruplicar) la seguridad interna, poner más luz en los trayectos entre escenarios y exigirle a la autoridad una mayor y mejor presencia policiaca en los alrededores.
Ah claro, también será importante dejar de polarizar. Los ataques de medios ligados s Live Talent (ligados, no me consta que manejados por ellos) contra el México Metal Fest fueron, por momentos, patéticos. Trolls hay en todos lados, sólo basta ver las páginas en Facebook del Vive Latino, por ejemplo, pero ahí nadie los alimenta. Promover la polarización es mal negocio, y es algo que ya también deberían haber aprendido, porque no es la primera vez que se les revierte.
El público tiene la última palabra, pero debe aprender a tener esa palabra por sus propios criterios, y no porque el este wey, el aquél wey, la página fulana o el perfil sutano se lo diga. Hay un borreguismo brutal en redes, y no aporta nada. En todo caso, lo que deberíamos hacer todos es ser responsables de nosotros mismos: si quieres ir a un show de Live Talent, deberás tener siempre en cuenta su accidentada historia y saber cómo puedes protegerte como consumidor. Y claro, creer más en canales oficiales que en pseudo informadores.
Aquí la conferencia.