domingo, octubre 27, 2013

Black Sabbath.

No quiero empañar uno de los conciertos más memorables en mi historia como asistente a los mismos, así que no hablaré casi nada de Megadeth. Es una de mis bandas favoritas de todos los tiempos y lo seguirá siendo, y por eso justamente me parece ... me vienen a la mente muchos adjetivos que no usaré, dejémoslo en que con ese audio (sea de quien sea la culpa, y yo creo que es de la gente que maneja a Sabbath), mejor no reseño nada.

Sabbath es el inicio.
"¿Es este el fin del inicio, o es el principio del fin?
¿estás perdiendo el control o estás ganando, será que tu vida es real o es sólo pretensión?"
Son señores grandes. Mi papá acaba de cumplir 70 años, hoy ´por ejemplo murió Lou Reed a los 71 y vaya que se sabe de sobra que en Sabbath Iommi tiene cáncer y Ozzy está vivo de milagro, pero a pesar de eso tienen una presencia escénica que hace que todo eso se te olvide. No brincan como chapulines (ya ni Ozzy lo hace tanto y es perfectamente entendible), de hecho Iommi y Geezer casi no se mueven, no van más allá de una que otra sacudida de cabeza y algún gesto, pero tampoco necesitan más. Más de uno que se ha dedicado a escribir la historia del metal en algún libro o en algún artículo ha declarado que Ozzy es, entre otras cosas, el padre del headbanging. Yo no tengo una videoteca suficiente ni mucho menos una memoria espectacular para afirmar o rebatir esa aseveración, pero en lo que poco o mucho que recuerdo haber visto en videos y programas en toda mi vida, es cierto: no recuerdo a nadie antes de Ozzy sacudiendo la cabeza como sonaja de carne y hueso, y eso lo sigue haciendo a sus sesenta y pico. Y se le agradece, por supuesto que se le agradece.
Iniciar con War Pigs es como aquella vez en el Palacio que AC/DC empezó con Back in Black. Es una afrenta pero se hace porque ellos (me refiero ya a Sabbath) saben perfectamente quienes son y que se pueden dar el lujo de arrancar con una rola que tranquilamente podría estar en el encore, en esos momentos de éxtasis en los que la gente ya nomás espera las dos o tres clásicas inmortales como ese momento en que ves en la cara de tu pareja que está a punto de llegar ahí, a donde te mata cuando llega y entonces disfrutas ese momento a tope, porque realmente no sabes si volverá a suceder. Tú siempre llegas, todos los hombres siempre llegan, pero en el caso de las mujeres es más complicado y por lo tanto más hermoso y especial. Así son o deberían ser los encores, y sin embargo Sabbath arrancó el concierto con War Pigs. Fue casi como decir "más les vale ser multi orgásmicos porque el primero de ellos viene desde la rola número 1".
Yo siempre he tenido entre mis favoritas algunas rolas que no son tan mainstream de la banda. Y no lo escribo por pose, sencillamente porque es la verdad. Y entre esas joyas está Into the void. El riff básico pero que de repetirse se convierte en una especie de sombra maléfica que crece junto a tí, que hace que la piel se ponga de gallina porque además tiene una letra inteligente y una línea melódica absolutamente sabbathesca, pero Sabbathesca tipo Ozzy si es que eso tiene sentido. Sabbath fue Sabbath todos esos años sin Ozzy, que quede claro. ya que el mundo corporativo los obligara a cambiar el mote a Heaven and Hell es otra historia, pero Sabbath no ha dejado de existir nunca, y sin embargo Sabbath con Ozzy es una entidad tan única e irrepetible que cabe decir Sabbathesco pero con Ozzy. Su voz, su forma de entonar, su forma de ofrecer las letras, su forma de crear melodías es un instrumento más, una distinción que crea un capítulo inicial que se llama Sabbath con Ozzy.

La perfección no existe...
aunque este concierto estuvo cerquita. En un mundo ideal donde la perfección existiera, sabbath hubiera tocado mi tema favorito de sus discografía con Ozzy, pero yo jamás he podido escuchar en vivo con alguna versión Sabbath o con Ozzy solo Sympthom of the Universe. Yo, de ser alguien que pudiera influir en la toma de decisiones de la banda pondría esa rola en lugar, por ejemplo, de Under the sun. Pero eso es una utopía y querer cambiarla no significa que sea mala, todo lo contrario. Y tal vez Volumen 4 es un disco no tan querido por mí, pero es un clásico.
"Así que cree lo que te digo, es la única manera que hallarás al final
sólo cree en ti mismo, no hay necesidad de pretender
no dejes que esas personas vacías interfieran con tu mente
sólo vive tu vida y déjalos detrás".
Luego se rifaron Snowblind. Una tras otras las rolas se sucedían y dejaban una cátedra de principios. El bajo de Geezer Butler sonaba gordo como puerco en matadero, maravilloso en todo momento. Es uno de los músicos más importantes en la banda de metal que me digan simplemente porque él se encarga con esas cuatro cuerdas de darle cuerpo a la música de Sabbath mientras Iommi se va por ahí a tocar solos cargados de pasión, misterio y sentimiento. El bajeo de Geezer es también como una gran sombra que crece al lado de Sabbath como entidad, sólo que aquí la referencia a la sombra es un cumplido porque debemos entender que siempre, invariablemente, para que exista una sombra tiene que existir una fuente de luz. Y Ozzy tendrá sus razones, pero era un poco evidente que en su tabla de jerarquías, Geezer está detrás de Iommi. A Tony lo presentó en muchas de las rolas, a Geezer no. Tampoco le hace falta, es un gigante silencioso que se sostiene solito sobre sus dos pies, igual que Iommi y que Ozzy.
Me pareció curioso que la primera rola nueva que tocaron fuera Age of reason. Me encanta, como todo el disco, pero creí que tal vez la primera que tocarían del 13 sería alguna de las que se han manejado como sencillos, si es que el concepto de sencillo se mantiene vigente en nuestros tiempos. Como sea, era un momento idóneo para cambiar el estado mental del público y la manera perfecta de lograrlo es tocar una rola que muchos, muchísimos de los 60 mil (según cifras oficiales) testigos no conocían. Y aquí sería un buen momento para quejarme amargamente del público, pero no lo haré, escribí que no quería empañar lo bueno del concierto y no lo haré, sólo dejaré constancia de que aún pienso como antes en referencia a frases que uso seguido como "nadie nace metalero, se hace" o "todo mundo tiene derecho a ir a un concierto aunque no sea fan", pero también dejaré constancia de que en Sabbath había muchísimas personas que estaban ahí por las razones equivocadas y eso provoca problemas e incomodidades.

Por fin, a llorar.
Porque llorar no significa necesariamente que salgan lágrimas a mares y que mojes el piso. Una lagrimita por ahí acompañando a la piel erizada, las mariposas en la panza y el repentino frescor que causa el viento frío en la cara son suficientes en mi libro de definiciones para decir que lloré. Y sí, Black Sabbath sí la había escuchado varias veces antes, con Ozzy solista, con Sabbath versión Dio, pero jamás con Tony, Geezer y Ozzy juntos. ese fue tal vez el único momento en el que maldije mi suerte por no haber visto jamás a Sabbath con Bill Ward. Porque si he de ser sincero debo aceptar que Clufetos hizo un gran trabajo. respetó en buena medida las rolas y la forma en que fueron grabadas y le metió por aquí y por allá un toque suyo. Nimiedades, lo importante era que esa rola es el inicio de todo y que tres de los cuatro que la grabaron, por fin, la estaban tocando en frente de mí y de 59, 999 personas más. Espectacular, sexual... no sé bien como definir el sentimiento y se me ocurre que la manera más fácil es justamente hacerlo fácil: la escuché y pensé: Por Fin. Y ya que el sexo se ha aparecido en este texto, diría que escuchar y ver esa rola con esos tres al frente fue como el momento en el que encuentras en tu pareja ese secreto que los lleva a ambos a un mundo que ninguno de los dos conocía, ese momento en el que a gritos, en murmullos o en silencio la frase que llega es justo esa, por fin.
Y ya entrados en gastos, después de tocar Black Sabbath podrían haber tocado cualquiera y hubiera quedado perfecta. Behind the wall of sleep es otra que no es de mis favoritas pero era como tomarse un whisky después de un orgasmo, sencillamente lo disfrutas por lo que es porque en tu cabeza y tu entrepierna aún están las cosquillas del momento anterior.

No confundas lo supuesto con lo comprobado.
"Algunas personas dicen que mi amor no puede ser real
por favor cree en mi amor y te demostraré que sí
te daré todas esas cosas que tú creaías irreales
el sol, la luna, las estrellas todos ellos llevan mi sello
Oh yeah!
Sígueme ahora y no te arrepentirás
dejarás atrás la vida que llevabas antes de conocerme
tú eres la primera en tener este amor de mi parte
y estarás conmigo por siempre hasta el final de los tiempos
Tu amor por mí debe ser real
antes de que sepas la manera en que yo me sentiré
yo me sentiré
yo me sentiré
Oh yeah!
Ahora te tengo conmigo, bajo mi poder
ahora nuestro amor se fortalece cada hora
mírame a los ojos y sabrás quién soy
mi nombre es Lucifer, por favor toma mi mano".
Y así, con esas líneas nació la leyenda. ¿Por qué le pusieron puntos entre las letras como si fueran iniciales a la palabra Nib? Nunca lo he sabido. lo que sí se es que Nib era un apodo de Bill Ward, y significa la punta de una pluma. nibby le decían, nomás que con esa letra y los puntos como iniciales confundieron y siguen confundiendo a miles. De ahí que muchas reseñas en diarios y páginas usen la referencia "satánica" para hablar de Sabbath. La rola jamás ha significado Nativity in Black, tanto es así que mejor en la versión japonesa y algunas europeas de lujo del disco 13 viene un tema que, ahora sí, se llama Naïveté in Black.
Ahora que menciono el 13, la siguiente rola que tocaron es la que abre justamente ese larga duración. Maravillosa End of the beggining. Y si el bajo de Geezer suena gordo como elefabte en cada rola, en las tres que tocaron del disco nuevo sonaba aún más pesado, magnánimo y fuerte. En todo el disco se le escucha, le da cuerpo a las canciones y en vivo, el trabajo del ingeniero de audio es espectacular porque permite que el bajo respire hondo en la mezcla y sin que opaque nada, luce como si fuera una banda fundada por el bajista. Igual que con Behind the wall..., Fairies wear boots me parece un tema que tranquilamente podría ser sustituido por alguno otro (cualquiera de Sabotage, disco que se brincaron olímpicamente), aunque al mismo tiempo es una rola disfrutable que después de un monumento como End... no suena tan fuera de lugar. Sirvió también para que llegara el momento de darle bola al "nuevo", al músico que muchos (y me incluyo) le traíamos cierta animadversión sencillamente por ser el reemplazo de Bill ward. es como con Kiss, Eric Singer (y en vida Eric Carr) es mejor bataco que Peter Criss, pero Peter es el original. Una vez que te sacudes ese malestar y le das chance de mostrarse, Eric deja clarísimo que es un musicazo (que por cierto también tocó con Sabbath, por si alguno quiere decir que qué diablos tiene que ver Kiss con Sabbath). Ese es el caso con Clufetos. Para ese momento del concierto ya había dejado constancia de que es un excelente entretenedor (no sólo toca sino que se mueve, agita los brazos, ataca la batería como animal herido...), que respeta la música creada por ward (salvo algunos detalles tocaba las rolas tal cual son) y que pretende ganarse el cariño del público por la derecha, es decir, tocando la batería y no haciendo declaraciones. Y como a cada iglecita le llega su fiestecita, los Sabbs le dan cada noche su oportunidad de ganarse el aplauso con el sudor de su frente en rat salad. No, no esa el mejor baterista del mundo, tampoco es en mi visión el mejor solo de batería entre las bandas de metal (sigo creyendo que nadie como Micky dee para eso) pero sí, sí es un trabajo soberbio el que hizo. Fue un solo de baterista moderno, mucho trabajo con el doble bombo que tuvo sus toques de fiereza nomás con la manera brutal en que ataca sus tamblores. Muy buen solo ciertamente. Particularmente el detalle de usar esa especie de cinta en la cebza, muy al estilo de Bill Ward, me pareció un detalle acertado y un gesto de nobleza. Sí, se ganó a pulso el enorme aplauso que le dieron 60 mil.

Villamelones por todos lados.
No importa, siempre están en los conciertos y curiosamente siempre están en General A. No importa que muchos sólo fueron al concierto por Paranoid y por la del Iron Man. No importa tampoco que algún diario por ahí pusiera que tocaron la rola Iron Maiden. Nada de eso importa porque Iron Man es a Black Sabbath lo que el Cristo es a la religión católica: una pieza fundamental e ineludible para entender la historia. Podría escribir muchos párrafos sobre lo que fue escucharla y verla en vivo con Geezer, Ozzy y Tony pero mejor lo dejo así. Hay veces que pocas palabras explican más que muchas. Pero, ¿cómo sigues un concierto si eres Black Sabbath y acabas de tocar otra de tus rolas imprescindibles? Fácil, le das entrada a una rolota nueva como lo es God is dead? Ya para entonces Ozzy había dicho decenas de veces que nos amaba a todos, se había hincado para revernciar a Iommi y al público, había gateado hacia el mismo Iommi y lo había hecho también como tres veces con Geezer que huía de él con una sonrisa enorme en su cara que muestra sencillamente que a sius sesenta y tantos, los Sabbs ya no se odian entre sí, ya simplemente disfrutan hacer lo que hacen y darse cuenta que lo hacen tan bien que juntan a 60 mil personas para atestiguarlo. Sí, Ozzy es un gran frontman. No es porque nunca lo ha sido un gran cantante, pero vaya que es una personalidad y vaya que es su voz y su forma de cantar la que fundaron junto con las capacidades de los otros tres originales lo que hoy reverenciamos como la banda primigenia del metal.
Ya para terminar tocaron Dirty woman, pretexto ideal para pasar senos de todo tipo en la pantalla monumental que tenían de fondo. Delicia de rola que sabe a "ya mero nos vamos pero mientras aquí les va un hard rock sabrosón pa que se empujen lo que les queda de chela en sus vasos" que dio pie a un clásico más, a un sonido que en lo personal me acompañó en innumerables ocasiones y que aún hoy, casi 40 años después de ser grabada me sigue gustando igual, la maravillosa Childfren of the grave. Imposible al menos en mi caso no sacudir la cabeza y tararear el riff sin importar que la baba se escurra por la boca porque prefería seguir tarareando y sacudiendo la cabeza que preocuparme por las formas. Maravilloso final, porque ahí acabó.

Paranoico.
Obviamente Paranoid era el encore. No podía ser de otra manera, cada concierto de Sabbath con Ozzy debe terminar con esa rola que se escribió de último momento porque quedaban 3 minutos y garra de cinta en el estudio y no querían desperdiciarla. ¿Quién diría que una rolita de relleno se transformaría con el tiempo en la rola de cierre de la banda que inventó el metal? Sí, metafóricamente mi brazo (mi hombro) me recordó aquella vez que en ese mismo insufrible, feo y frío Foro Sol me lo rompí en un concierto de Ozzy, justo cuando cantó Paranoid.
Y así terminó el concierto más importante de mi vida si quito de la fórmula los de Kiss. Así nada más, POR FIN.

lunes, octubre 21, 2013

Sobre Batalla 2014.

Batalla 2014

INFORMACIÓN IMPORTANTE SOBRE BATALLA:

Desde hace 5 años, la Batalla en Wacken cuenta con 30 espacios para igual número de países. Cada año el número de países ha crecido, pero los 30 espacios se mantienen. Los alemanes lo han resuelto hasta ahora porque cada vez ha habido 2 o 3 países que se toman un año sabático. El convenio es así: si descansas un año estás seguro para los siguientes dos. Bueno, este año hay 36 países y 30 espacios, tres se tomaron un sabático voluntario y se tuvo que sortear a los restantes 3, quedando México entre ellos.

Por lo tanto, México no participará en Wacken Metal Battle 2014, pero estamos puestos para el 2015.

Ahora bien, para no dejar que esto se muera de aburrimiento, nosotros, los organizadores de la Batalla en México y Circo Volador, encontramos una alternativa que esperamos les llame la atención y motive su participación, quedando como sigue:

Concurso 2014
W:O:A Metal Battle México y Circo Volador

Convocan a todas las bandas mexicanas de Metal que pudieran estar interesadas, a participar en la Batalla Especial 2014, que tendrá como incentivos lo siguiente:

• Al primer lugar del concurso, Circo Volador le grabará un disco completo en su estudio (lo encuentran en Facebook como Circo Volador Estudios), con todos los gastos relativos (equipo, ingeniero, tiempo de estudio) pagados.
Entregando al final el respectivo Master, listo para su producción. Este disco,, la banda lo podrá producir donde deseé y los derechos serán de la propia banda, no teniendo ningún compromiso de sello ni de producción con el Circo Volador.

El compromiso de Circo es entregar un Master a la banda; la maquila, distribución, diseño y demás aspectos propios de un disco son tema aparte de esta convocatoria y dependerán totalmente de la banda.

• Las bandas que queden en 1o, 2o y 3er lugares, tendrán pase automático a la final de la Batalla que se realizará para acudir a Wacken 2015.

Esto es, las bandas 1, 2 y 3, estarán automáticamente, sin necesidad de concursar de nuevo, calificadas para la final de las bandas de la Batalla para el 2015.

Procedimiento para participar

Las bandas interesadas en participar deberán entregar un demo CD de tres canciones (sólo tres por favor) en sobre cerrado que traiga como remitente el nombre de la banda en cuestión, en formato MP3 o .WAV a la siguiente dirección.

Centro de Arte y Cultura Circo Volador
Calzada La Viga 146
Col. Jamaica
C.P. 15800
México D.F.

Los participantes deberán llevarlo físicamente al Circo Volador en horario de 12 a 19 horas, de lunes a viernes y entregarlo en sobre cerrado con el nombre de la banda ya sea en la Taquilla del Circo o en el Área de Talleres. Se otorgará un recibo a quienes entreguen su material.

El costo de inscripción será de $50.00 (cincuenta pesos 00/100 m.n.) para gastos administrativos.
No se cobrará ninguna cantidad adicional a los participantes.

El plazo para entregar materiales concluye con el año, es decir, la fecha límite para recibir trabajos es el 31 de diciembre de 2013.

Un jurado especializado, que daremos a conocer en su momento seleccionará 16 (DIECISÉIS) bandas que tendrán la oportunidad de presentarse en vivo en el Circo Volador.

Allí, (TOCARÁN SETS DE 15 MINUTOS) y concursarán por un puesto en una final de 6 (SEIS) bandas.

Esto se hará en dos fechas (POR ANUNCIARSE) y se calificará como en los primeros 4 años de la Batalla, con un formato específico que arroja un promedio numérico por banda.

Al final, los seis ganadores tocarán un set de 25 - 30 minutos y de ahí saldrán los 3 ganadores seleccionados en 1o, 2o y 3er lugar.

Asimismo, tanto las eliminatorias como la final se harán abiertas al público con un costo general de 50 pesos la entrada.

jueves, octubre 10, 2013

M.M.M. Fest

M.M.M. significa Monstruos del Metal Mexicano. Eso significa que esta entrada es sobre ... justamente, metal mexicano. Este es el mejor momentos para no seguir adelante si no te gusta el metal nacional.

A mí sí me gusta, y en términos generales me gusta mucho. Debo reconocer también que ha sido un gusto adquirido, no nací amando el metal nacional ni hispanoamericano, esa es la verdad. De chavo sí pensaba que el metal debe ser en inglés, y aunque esa actitud equivocada no duró mucho, pues sí pasé por ahí. Pero luego uno cambia, entiende ciertas cosas y en general, el día que te quitas la venda del prejuicio de los ojos, encuentras que hay muchísimas cosas altamente disfrutables en el mundo del metal creado en hispanoamérica en general y en México en particular. Pa acabar pronto, si no sintiera de verdad al metal nacional, no existiría la Batalla de Wacken, y me refiero a que no existiría como es, porque quizás alguien más la habría hecho pero sería su visión, y no la mía.

Explicado esto, me consta porque lo he vivido de primera mano que el metal mexicano sufre muchísimo por dos razones básicas: porque vivimos en un país impresionantemente malinchista, inculto y fanático y porque no hay ni interés ni infraestructura como para impulsar algo que no sea conveniente, bonito, inofensivo, sutil, de hueva... Lo primero es muy difícil de combatir, y por esa razón se apuesta a llegarle a quienes no están metidos en esa caja de intolerancia. Pero lo segundo sí se puede trabajar y mejorar, y ahí cada quién sabrá cuál es su aporte, o si tiene oportunidad de aportar algo, o no. Si tampoco es a fuerza, pero si tienes chance de hacer algo, es mucho más digno hacerlo que no.

En ese sentido creo que la figura de Juan Santos es muy importante para el metal nacional. Sí, obviamente hay mil historias y mil formas de ver su aporte o no, bueno, yo tengo la mía. Lo conozco hace muchos años, muchísimos, desde por ahí del 92, y sé que su gusto por el metal ahí ha estado siempre, y su apoyo también. Sí, podría buscarle las cosas negativas y exponerlas, pero no creo que sea ni justo ni necesario. Mismo caso con mi querido amigo Carlo Hernández; sí, hay cosas que mejorar en Chas, pero eso no quita que a su manera, pone su granito de arena. ¿Por qué hablar de ese Juan Santos? Porque él es el promotor detrás del M.M.M
Fest. Para mí, ya no como manager de una banda que tocó ahí sino como metalero, el simple hecho de crear un festival así ya es meritorio. Tons, ¿hay cosas que se pueden y deben mejorar? Claro. ¿Eso es sinónimo de tranza, corrupción, malhechura y demás cosas? No. Y lo digo con 5 años de organizador de la Batalla, porque lo he vivido y sufrido. Así, yo prefiero decir públicamente "Gracioas JSC Producciones por el esfuerzo" y en todo caso decirle a Juan, en persona, lo que creo que podría mejorar.

Y ya en cuanto al festival, a pesar de que sí era un cartel muy largo y que ese mismo hecho ayuda a que sea más fácil que algunas cosas salgan no del todo bien, también era una GRAN oportunidad de ver a un montón de bandas legendarias, de esas que simple y sencillamente plancharon el camino para que las de hoy tengan una mejor perspectiva de salir adelante. Y es que no siempre tienes en el mismo cartel a pilares como Ramsés, Megatón, Luzbel, Transmetal, Mákina, Inquisidor, Next, Six Beer... y bandas más recientes pero de impecable calidad como Voltax, Maligno, Agony Lords, Raped God 666 o Séptimo Ángel. Y es menos común aún que el escenario que se ofrece a las bandas sea de excelente hechura: con tamaño suficiente para que todos se sientan a sus anchas, con dos baterías montadas para perder la menor cantidad de tiempo posible, con excelente audio, con excelente equipo de luces, con una pantalla al centro que puso el logo de cada banda para que siempre supiera la gente quién estaba en el escenario. Ya cada banda sabrá cómo les fue en la feria, pero como público, eso se agradece y de corazón.

A título personal puedo decir que fue un orgasmo de placer ver a Megatón y escuchar en vivo Poseído, Vida después de la muerte, y Con los brazos abiertos, entre otras; o ver a Ramsés y escuchar Rey de las bestias y Larga vida al metal; a Mákina y escuchar Chorizo o Ciudad de cagadas y lo nuevo que traen; o qué tal Luzbel con Raúl Greñas y temas como Kirieleison, Guerrero Verde, Por Piedad o El ángel de la lujuria; o Next con Debes morir y 1,2,3,4 o Maligno (una de las mejores bandas de metal en México desde mi punto de vista, que además me lo demuestran cada vez que los veo y gozo en vivo), Agony Lords, Disgorge... Y claro, Voltax con los clásicos (porque lo son, aunque se enojen los que se quieran enojar) como Love is Hell y Acero Inmortal más Estruendo letal por ejemplo. Fue una conciertazo.

Y me perdí a Alice in Chains, pero luego de lo vivido la verdad no me arrepiento. Unas por otras y ver un concierto con todas esas bandas una tras otra, con excelente producción, con camaradería entre las bandas, con buena audiencia (aunque podría haber sido mejor aún), eso para mí no tiene precio. El metal en México está vivo, caliente, fuerte y con enormes posibilidades. Desafortunadamente la mayoría de la gente no lo apoya, pero afortunadamente fuera de México se conocen a muchas bandas. Quizás no en cantidades medibles con miles de discos vendidos, pero vaya que se venden, que gracias a la red hay muchísima gente que sabe que México tiene una escena vibrante. Vaya, sólo falta que lo sepamos nosotros y nos sintamos orgullosos de lo que tenemos, como los espáñoles con sus bandas, los argentinos con sus bandas, los chilenos con sus bandas.

Larga vida al M.M.M y en general a todos los esfuerzos por sacar adelante esto. Insisto, hay muchas cosas que corregir en términos generales, pero es más fácil corregirlas si hay apoyo que si no lo hay. Siempre es más fácil mirar las cosas malas que las buenas, regresar al pasado y reclamarlo como si fuera el presente, encabronarse por un hechoconcreto y de paso sacar mil trapos al sol que agarrarse de lo bueno y tratar de construir desde ahí, y entonces sí, ver lo malo y corregirlo.

Migraña en sí hay monstruos de metal en México mode on.

sábado, octubre 05, 2013

Orgullo, pasión y gloria

Y sí, es el título de un DVD de Metallica, pero como ando jugando a beber whisky y escribir en un estado de total "aturdimiento confortable", me vale.
Todo esto empezó con una onda deportiva que escribí en Facebook, pero decidí expandirla al rubro rock en este espacio que normalmente para eso uso, mi querido diario (bueno diario no es, eso está claro jaja) y para muchos, el odiado blog Sangre de Metal. Y es muy fácil, como siempre, lo que escriba ahora saldrá directo del corazón, filtrado por mi mente, sin regresar a ver qué estoy escribiendo y terminará cuando termine.
Lo del Facebook lleva una frase que me gustó escribir: la pasión no necesita argumentos. Y lo escribí de corazón pues, es mi verdad, es como veo las cosas, aunque ahora vea el teclado doble jaja.
Si quito a Kiss que es para mi muchísimo más que una banda de rock sino un motor, una filosofía, una forma de ver, sentir y vivir la vida, mi top 5 de bandas de metal/hard rock es este: Sabbath, Megadeth, Metallica, Helloween, Judas Priest. Esa es mi pasión, y puede ser que al igual que mi pasión deportiva, esto parezca muy "mainstream" o para hablar en términos coloquiales entre rockeros, muy poser. Parece cómodo ¿no? son bandas que a mucha gente le gustan y que por eso pierden valor ante los ojos de aquellos true metal warriors que sólo entienden el metal si te gustan las bandas más oscuras, o más rofanas, o más atascadas, o más subterráneas, o más desconocidas del mundo. Esa actitud me de una flojera eterna, me parece enfermiza y sí, MUY poser. No conozco a nadie que no tenga los llamados "gustos culposos" por ejemplo, pero conozco a muchísima gente que los niega.
¿Por qué ese top 5? Bueno, no es importante, es mío y de nadie más, pero por alguna curiosa razón cuando uno discute esto con desconocidos (escribir en el blog y dejar los comentarios abiertos para cualquiera es el mejor ejemplo) se convierte en un debate que más veces de las normales, termina en pleito.
Veamos.
Sabbath. A ellos los conocí calculo que antes de haber cumplido 10 años, o por ahí. Recuerdo muy bien la portada de un disco de éxitos que se llamaba We Sold Our Soul To Rock and Roll. Pero recuerdo también que a pesar de que tal vez fuera Paranoid lo primero que escuché de ellos, lo primero que tuve y que me impactó sobremanera fue el maravilloso Sabotage. Antes de tener, qué se yo, 13 años, ya me había enamorado para siempre de temas como Hole in the sky, The writ, Am I going insane? y claro Sympthom of the Universe. Y como este espacio es real y aquí suelo escribir lo que creo, pienso, siento y he vivido (y vaya que eso me ha traído enemistades) he de confesar que en ese tiempo no sabía(y en general el mundo no hablaba mucho de) que Black Sabbath era la banda que "inventó" el metal. Es más, en esa época no se le decía metal, se le decía rock pesado. Es imposible pensar en el metal sin Sabbath. Puede no gustarte, claro, pero eso no significa que puedas restarle su mérito y su impacto en la historia. Y con esto aclaro que a mí Sabbath me gustaba desde antes que se pusiera de moda, claro, con las acotaciones pertinentes como que yo tenía 13 años en 1984. Y sí, no sabía que estaba Dio con ellos, y no me avergüenza aceptar que era un niño pre adolescente que se enteraba de sus bandas por leer revistas en las que salía Kiss en la portada. No había internet y había infinitamente menos sabelotodos de wikipeadia entonces. Lo que uno sabía lo sabía como en terrenos tipo el sexo y las drogas: por experiencias propias marcadas por el clásico error/acierto o por lo que los amigos, hermanos mayores, primos o tíos rockers nos decían. Aún recuerdo como me sacó de onda el Born Again (historia que ya he compartido aquí por cierto y que sería redundante repetir) cuando escuché por primera vez Disturbing the priest. Es muy fácil, la manera de tocar de Bill Ward me parecía impresionante. Todo lo demás también, pero sin Ward, Sabbath sería otra banda completamente distinta.

Megadeth. Me tardé en tomarla como banda 2 de mi top 5. Me fui haciendo más fan con el paso de los años. Igual que Metallica, insisto, esto es una cuestión de edad y no de saber o no saber: yo conocí a Megadeth con el Killing is my bussiness recién sacadito del horno, pero porque ya era yo adolescente en esa época. Por eso cuando Mustaine dice "Well that was back in the day, And if you weren't there, It doesn't matter anyway, Because you wouldn't understand..." sonrío. No hay necesidad de explicarle a un chamaco (y conste que yo jamás olvido que también fui chamaco y también fui imbécil en muchas cosas, es un proceso normal y hasta necesario) por qué me gusta Megadeth tanto. Me gusta y ya, lo viví desde sus inicios, por eso tal vez entiendo algunos de sus momentos osuros (por eso y por ser fan de Kiss que está lleno de momentos oscuros). Y lo pongo encima de Metallica porque me parece que la carrera de Megadeth es más consistente, más llena de obstáculos bien librados. Ningún disco de Megadeth (ni de ninguna banda thrash de los 80 pa acabar pronto) me parece mejor ni más impactante que Master of Puppets, pero Megadeth tiene mucho más discos sólidos que Metallica. Y Mustaine es arrogante, contradictorio, pesado y cruel, como debe de ser.

Metallica. Master of Puppets. Fin de la historia.
Bueno, no tan fácil. Igual que Megadeth e incluso por una cuestión meramente histórica, pues los conocí antes. Yo los escuché la primera vez como a los 6 meses de que salió al mercado Kill em all. Era demasiado intenso, era un sonido que sencillamente no existía, no en mi mundo por lo menos. Y luego Ride the lightning, ¿cómo no enamorarse de esas rolas? Y luego Master, el disco más trascendente para mí (en perspectiva claro, en ese tiempo simplemente me parecía soberbio, no histórico) después de Black Sabbath de Black Sabbath. Y sí, muchos, muchísimos dicen que Reign in Bllod es mejor, más trascendente, más esto y más lo otro que Master. Para mí no. Y muchos, specialmente los fans de Maiden dirán que Metallica NO es la banda más grande del mundo. Bueno, habría que definir grande. Si grande viene de la mano de los números, lo es. Si grande depende de lo que cada quien entienda por trascendencia, pues entonces es una discusión sin fin y sin lógica, porque donde juegan los gustos reina la subjetiidad, muy válida por cierto. Lo que nadie puede negar es que Metallica en vivo es una aplanadora. Sí, tienen sus 8 años de tres discos horribles como lo son para mí (y para buena parte del mundo) Load, Re Load y St Anger, pero poniendo en contexto las cosas (es decir, tomando en cuenta que la banda tiene solamente 9 discos en estudio sin contar Lulu que NO es un disco de Metallica) queda entonces este pensamiento: dos terceras partes de su discografía es impresionante o muy buena. Eso es algo que muy pocas bandas pueden presumir, aunque una vez más esto recae en el rubro de gustos, y por lo tanto no es objetivo.


Helloween. Igual, los conocí sin haber escuchado siquiera su nombre gracias a un EP llamado Judas que me llamó la atención por su portada. Y escuché entonces Ride the Sky, y cambió mi percepción de lo que era el heavy metal. Y de ahí pa'l real. Keeper 1 y 2 son dos maravillas que tranquilamente opacan la historia "oscura" de discos como Chamaleon (que por cierto a mí sí me gusta). Y a mí no me molesta la era Deris, yo sí creo que la trilogía Master of the Rings, The time ofthe oath y Better than raw es sencillamente impresionante. Y los primeros discos de la banda me recuerdan la secu y la prepa, a mis amigos de entonces, las vivencias de ese tiempo, las locuras que viví, las muertes, amores, amistades y todo lo que pasa en ñla vida de un adolescente. Así de fácil. No hay necesidad de teorizar al respecto.

Judas Fucking Priest. Siempre me ha gustado pero entró en mi top 5 hace mucho menos tiempo. En algunas épocas han estado otras bandas ahí como Zeppelin, Maiden y Testament, pero Priest es una banda que ha crecido en mí poco a poco. Y escribieron un disco como Painkiller, lo cual debería ser suficiente razón para tenerlos en mi top 5. Es una banda que se lleva mal entre sus músicos, que ha tenido sus deslices gachos, pero que siempre regresa. No llenan estadios del tamaño que Maiden que es su contra parte más directa, pero tienen más estabilidad en su música, en su concepto y en su estilo. Salió Halford y aunque Ripper fuera un clon vocal, ¡vaya pinche clon que se consiguieron! Y a muchos no les late pero para mí Angel of Resurrection es sencillamente el mejor disco regreso de una banda de metal.

¿Todas son bandas típicas? Sí, mátenme. Me gustan pinche mil bandas más, pero estas cinco están donde están y dividen opiniones y se mantienen activas sin chistar por algo, y según yo ese algo es saber hacer su arte, sentirlo, vivirlo y exponerlo. Podría poner un Top 5 súper true, porque también me laten muchas bandas subterráneas, pero sería una gran hipocresía. Yo no veo la popularidad de estas bandas como un elemento que juegue en mi contra al mencionarlas como mi Top porque le gustan a mucha gente, yo lo entiendo como que su popularidad es directamente proporcional a su capacidad, talento y trascenencia. Es decir, me vale madres si son populares y eso a muchos les dice "vendidos". A mí me dice "chingones, y es una pasión, no un argumento. Digo, no es física cuántica, es el gusto musical, nada más. Es lo que hace que Orgullo, Pasión y Gloria sea un título perfectamente apto para una banda.