No Metal. Vive Latino 1 en imagenes.

Hasta ahora el llamado oficialmente Festival Iberoamericano de Cultura Musical Vive Latino se ha llevado a cabo en ocho ocasiones. Yo he estado en seis. Este año, por estar ahí me perdí a Obituary (y dicen algunos que también me perdí a Sadus, que sonó bien y que tocaron muchos material viejo). Porque una cosa es no ir a un concierto, y otra es perdértelo.

En fin, este año el Vive volvió a ser de dos días. Los que nunca han ido deben saber que además de tres escenarios, cada año se monta un área cultural y un espacio para el Chopo, para revistas y sellos discográficos independientes.

El sábado estuvo más flojo en cuanto a personal. Al final llegaron como 45 mil personas. Una de sus actividades favoritas es volar:
Esto se logra desprendiendo las alfombras que se usan para cubrir el campo de béisbol. Varias personas toman un pedacito de alfombra y jalan al mismo tiempo. Si jalan bien, te levantan chido, como a esta persona. Yo lo hice hace dos años y el vuelo es una buena experiencia, jajaja.

Cada año la queja de cientos es la misma (y particularmente de algunos reporteros): "el cartel es una mierda". Pero de acuerdo a la foto de arriba, tomada a las 3 de la tarde, a muchos les gusta estar ahí nomás por estar. Esa es una toma extraña del Escenario Rojo o principal.

México es hermoso, pero es bizarro. ¿Habrá alguien que pueda negarlo? Conviven lo pagano y lo religioso, como el Zócalo, su enorme Catedral Metropolitana y los restos enterrados del templo Mayor. Y su gente es bizarra, y sus bandas de rock (algunas aunque sea), también.
Los Austin TV tocaron así todo su set de 35 minutos. Casi no se ve, pero del lado derecho de la foto hay un arbolito de navidad. Eran botargas que enfundaban a algunas fans. Cuatro si no me equivoco.
Este era uno de los tres surferos de Sr. Bikini. El surf es música amigable y simpática, casi siempre instrumental. Sólo cantaron en una, es que dice que "la arena estaba de bote en bote, la gente loca de la emoción; en el ring luchaban los cuatro rudos, ídolos de la afición" y la banda (que para entonces ya llegaba a más de 10 mil) contestaba "el Santo, el Cavernario, Blue Demon y el Bulldog".

Natalia Lafurcade y Amaral tienen el nada elegante título de ser bandas que la raza del Vive ha bajado del escenario. lo intentaron también con Dover, incluso descalabraron a una de las hermanas, pero no se bajaron: "putos, les voy a meter el puño por el culo para que sepan lo que es dolor. Nos bajaremos cuando acabemos, queráis o no" decía una de ellas. Y cumplió. este año, los que perdieron fueron los Calle13 (arriba). En una página apócrifa estaba la invitación: "no queremos reggaetón, los vamos a bajar". Tocaron sólo 15 minutos de 40 que tenían. No que esté bien agredir a las bandas, aquí he dicho mil veces todo lo contrario, pero digamos que este es un reporte, semi crónica en imágenes del festivalito, y eso es algo que sucedió. Sucedió y fue tan real como la vez que unos performanceros le hicieron el amor a un borrego como parte de la onda cultural. No recuerdo el año, pero La Jornada lo consignó en una de sus reseñas.

En la imagen de arriba, Ricardo Musso, guitarra y voz del legendario Cuarteto de Nos, de Uruguay. pero esta foto la pongo porque él se llevó el día con una frase: "Buenas noches México, estamos encantados de estar aquí por primera vez". Como lo muestra la foto, la noche estaba lejos, jaja. De hecho, ellos tocaron a las 14:30.Estábamos en que México y algunas de sus bandas son bizarras. Ella (arriba) es parte de Six Million Dollar Weirdo. No tengo ni la más remota idea del origen de su nombre, pero me recuerda al Six Million Dollar Man, que nosotros conocíamos como El Hombre Biónico, vieja serie de tv en la que el malo era un peludo llamado Sasquatch.El rumor insistente y estúpido, incluso publicado y dado por hecho por el Excélsior, era que Soda Stéreo se iba a reunir esa noche. Falso. pero claro, hasta que no acaba el concierto y de plano no pasa nada, la mayoría de la gente no te cree. Cerati (arriba) solista es aburridísimo, y esa noche lo dejo bien claro. Soda es fresa hasta la médula, pero él solito es además sin chiste y muy electrónico. En fin.¡Yo quiero una chamarra así! Lora es el Rey. Ya estaban dentro del Foro Sol como 40 mil personas, y en el escenario frente al Tri había como 25 o 30 mil. Al principio la banda no muy prendida, pero Lora es viejo lobo de mar, y no tardó en ponerlos locos. "Aplausos chingada madre. es más, todos a la voz de puto el que no aplauda" (todos aplaudieron, menos los que estaban en las tribunas). Chido mi banda, pero los de allá arriba son putos, porque no aplauden". Y así siguió un rato, prendiendo cabrón a la gente."Culeros, culeros, culeros" Y Lora señala a la banda, jajaja. "Ellos son los culeros, ¿verdad?". Mientras tocó el Tri, el Vive Latino inventó una nueva forma de entretenimiento. Miles (y es literal, miles) de vasos de cerveza aplastados volaban hacia el cielo. Hubo momentos en que los vasos voladores eran tantos que parecía que el cielo estaba lleno de estrellas fugaces, la neta, muy chido. La bronca fue que al día siguiente eso degeneró en bronca de vasitos entre tribuna y lona, con sus respectivas mentadas y madrizas.

La noche tuvo su pedacito de cielo metalero. No tengo fotos de Transmetal, pero les fue bien. Calculo unas 3 mil personas viéndolos. Sonaron macizo aunque un poco saturados. Buen slam. Y la noche cerró con Rata Blanca. Muy buen concierto, como siempre. Giardino, al mero principio le decía algo al bajista, algo como "métele más huevos" porque le hacía la señal. Él contestaba y Giardino decía "pues no te escucho". Pero se veía en buena lid todo. Sonó potentísimo.Barilari no perdió ni una sola nota, todavía alcanza los altos sin mucho esfuerzo (o eso aparenta):Al final y en un gesto que yo nunca le había visto, Giardino arrancó cinco de sus seis cuerdas, con cara de extasiado por el calor de cerca de 10 mil metaleros que acababan de corear a tope "La leyenda del hada y el mago", y las regaló al público. Pero imagínenselo así: toca alguna nota con sus caras típicas, mira al público, asiente y ¡zum! arranca la pinche cuerda para aventarla a la gente. Así cinco veces. Parecía que además iba a azotar la lira contra el suelo, pero no, la aventó al aire, la cachó y se fueron.La mayor parte de eso chou la viví desde adentro de la barricada, me acordé de todos ustedes y les mandé un saludito. (Dentro de las barricadas no se permite el flash, por eso Giardino y Barilari aparecen detrás como lejos, cuando la verdad estaban a un metro).

Mañana reseño el dominguín. Todas las fotos son de Ocesa, y el fotógrafo es Nicolás Turcheto.

Vive Migraña