domingo, abril 29, 2012

"Fear builds walls" Roger Waters.

Yo crecí con el rock y sus derivados en mi entorno desde muy chiquito. Mis papás no son precisamente rockers, muchísimo menos metaleros, pero escuchan música todos los días. Bailaban rock and roll tipo Los Teen Tops, por ejemplo. Del lado de mi papá, uno de sus hermanos y dos de sus primos eran rockers. Del lado de mi mamá, uno de mis primos hermanos era puro rock e incluso algo (poco) de metal. Crecí escuchando rock por diversas razones, pues. Ya he comentado antes del sencillo 45RPM de Kiss que me cambió la vida... En fin, mientras desarrollaba de manera totalmente empírica y autodidacta mi gusto por el metal también desarrollé un gusto totalmente "científico" (de prueba, error y confirmación) por el rock en diversos derivados. Uno de mis tíos solía grabar cassetes directo de la programación de Rock 101 cuando su slogan era "Idea musical". Él fue el que una vez que íbamos a jugar fútbol (él debe tener como 10 o 12 años más que yo) me dijo "está bueno eso de los Kiss y que te gusten, pero te voy a presentar a sus papás", y me puso a Led Zeppelin. Y así siguieron los años, empecé a meterme más y más en el mundo de las letras de las canciones, y me fascinaba porque el metal me hablaba en primera persona, y otros géneros derivados del rock lo hacían como en la primera persona del plural (nosotros). Y me encantaba leer, enterarme, entender las letras. Y me encantaba porque el rock que se hizo en los 60 y 70, y un poquito aún en los 80 tenía un compromiso. Podía ser con causas políticas o sociales o religiosas, pero se comprometía conj algo, y eso me llamaba mucho la atención. Yo era anti guerra por el rock; tenía cierta consciencia ecológica por el rock; desconfiaba del gobierno y la policía por el rock.
Y algunas veces el rock tardaba algunos años en desarrollar su influencia en mí. Vi por ejemplo The Wall como a los 13 años, y no le entendí nada. recuerdo que los amigos que la vieron en esos tiempos se centraban más en debatir si la imagen de inicio de la película mostraba a Bob Geldof (Pink) con un churro de marihuana en la mano, o no. Pero se quedó ahí en mi subconsciente, se convirtió en una de mis películas favoritas de todos los tiempos y cada vez le encontraba algo distinto, algún significado nuevo, o alguien me ofrecía alguna interpretación diferente de algún tema en concreto de la película, y por ende del disco. Años más tarde ya con el internet encontré páginas que dedicaban su existencia a desentrañar las letras de Pink Floyd, y buena parte de ese trabajo era en torno a The Wall. Vaya, crecí en esa época en que no tenía nada de malo ser rocker y tener una postura política definida (me refiero en este caso a Waters, creador de The Wall; yo sigo sin postura bien definida jajaja, a menos que ser anti PRI sea una postura "real"). Anoche fui feliz por muchas razones, y me sentí extraño por muchas otras. De entrada, durante 13 años que trabajé en Ocesa estuve acostumbrado a entrar al Foro Sol por un sector fijo; ayer entré por el mismo pero en la otra grada, y sé que es una tontería pero me sentía totalmente fuera de lugar teniendo que voltear hacia la izquierda cuando durante 13 años lo hice para la derecha. Hace esa misma cantidad de años que no iba a un concierto como público, sin preocuparme de nada que fuera llegar a tiempo, sin estrés, sin tener que perderme parte del show por cosas de trabajo. Y también hacía mucho tiempo que no me topaba con un músico de rock que tiene un compromiso total con una ideología. Ya ni las bandas de metal lo hacen cuando hace algunos años eso era el pan nuestro de cada día. El de anoche para muchos es el mejor espectáculo de rock que existe. Muchos lo comparan, según yo equivocadamente, con U2 por ejemplo. Y la diferencia es que el concierto de The Wall es en sí mismo una declaración de principios, mientras que U2 hace un gran montaje diseñado para el auto elogio y la falsedad, enmarcados en un patético intento de San Bono por parecer políticamente comprometido.
Todo en The Wall es un compromiso ideológico. Incluso los detalles más personales que abundan en el concierto, la alienación promovida por el entorno hacia las figuras públicas, incluso ahí hay un discurso ideológico lógico y claro. Que Waters se aprendiera en español una frase política que seguramente escribió él y que alguien más le tradujo tenía mucho más sentido y peso que cualquier monólogo de Bono sobre la pobreza y el hambre cubriéndose del sol con lentres de 30 mil pesos, reloj de 100 mil y ropa de diseñador. Waters es un humano contradictorio y lleno de emociones, y por eso se siente real. Bono es en cambio un títere que representa la parte "bonita" de la "disidencia política. Patético. Dedicar el concierto a los caídos en la "llamada guerra de narcos" como lo dijo él tiene mucho sentido. parte integral de The Wall se lee como el esfuerzo de Waters por entender en sí mismo su proceso de aceptación de la pérdida de su padre en la Segunda Guerra Mundial, por ejemplo. Todas las referencias bélicas en la película, en el disco y en el concierto apuntan a la tragedia de un niño que se queda sin padre por algo tan ajen o para todos como les una guerra. Cuando canta Mother, que es en primera instancia su forma de decir que el amor sobre protector de una madre puede ser sofocante, también hace una declaración política al preguntar "Madre ¿debo confiar en el gobierno? mientras que sobre la pared se escribe un rotundo "estamos hasta la madre". Y cada quie puede etenderlo como quiera, pero el punto es que a sus casi 70 años, Waters mantiene una postura política firme, y con el uso excepcional de la tecnología del Siglo XXI su grito es mucho más fuerte de lo que fue hace 32 años cuando salió el disco. Ojalá fueran más lo que hacen eso, los que toman una bandera (la que sea, como McCartney que enarbola la defensa de los derechos de los animales por ejemplo)y la ondean no sólo con orgullo sino con convicción. Y no deja de ser músico, se conmovió visiblemente por esa mexicanísima forma de entretenimiento de seguir el ritmo de una canción (Run like hell en este caso) en lugar de con las palmas, con la chispa de un encendedor. Y es justo eso a lo que quiero llegar, se vale ser rockero y divertirse al tiempo que se hace o se degusta una critica fuerte al sistema. Sin miedo al qué dirán Waters usa palabras duras en su repertorio, grafiteadas de manera electrónica y luminosa sobre la pared y lanza consignas bien planeadas contra elementos muy concretos como el capitalismo rampante, la religión, la codicia de la clase política... En una de las escenas proyectadas en la gigantesca pared que se construye durante el primer tramo del concierto se pueden ver cientos de aviones en formación militar que al momento de tirar bombas, éstas cambian por logotipos que en sí mismos encierran la crítica dirigida de Waters y su pensamiento de izquierda hacia el mundo. En un momento iconoclasta del concierto los aviones tiran como bombas los logos de Mercedes Benz, la estrella de David, la cruz del cristianimso y catolicismo, el logo de Shell, el de McDonalds y muchos más. La palabra "capitalismo", precedida del prefijo (o usado como prefijo simbólico si esto existe) Fuck, está escrito con la tipografía de Coca Cola, por ejemplo. También en esa pared se puede ver en varias ocasiones la imagen del No más sangre que tanto se ve en este país últimamente. Cuando llega el momento de "Bring the boys back home" llena la pared con imágenes de niños hambrientos, gente perseguida, asesinada y en general jodida por alguna razón que bien podría solucionarse si los políticos se dejaran de mariconadas y ambiciones. La canción, originalmente y de acuerdo al mismo Waters en algunas entrevistas viejas trata sobre la tristeza de quienes pierden a alguien en la guerra, y también sobre no dejar que algo, lo que sea que hagas se vuelva más importante que la familia y los amigos. Pero serio y humano como es (a diferencia de Bono por ejemplo) con el paso de los años ha cambiado su visión en torno a esa canción, o por lo menos la ha ampkiado y ahora incluye parte de un discurso de Dwight Eisenhower que dice: "cada arma que se construye, cada barco de guerra que zarpa, cada cohete lanzado significa, en un sentido final, un robo contra aquellos que están hambrientos y no son alimentados, aquellos que tienen frío y no son cobijados". Sí, yo crecí escuchando música rock que tenía algo que decir. Y también crecí escuchando bandas que equilibraban todo esto con música y temática ligera, porque también hace falta. No había tanto desintereés en el contenido del mensaje, y yo extraño esos grupos, esos discos, esas convicciones.
Maravilloso concierto el de Waters, pues, aunque musicalmente hablando se extrañó, y enormemente, a David Gilmour. El par de guitarristas que trae Waters (y que ha traído desde hace tres giras) es muy bueno, pero el sentimiento de Gilmour en solos como el de Comfortably numb sensillamente no estuvieron ahí. le puedes enseñar a un guitarrista una canción y que la domine nota por nota a la perfección (pregúntenle a Tommy Thayer), pero no les puedes enseñar feeling. Eso fue el único detalle anoche (aunque se sabe de sobra que no iba a suceder). Por lo demás, el jabalí inflable lleno de consignas políticas, la impresionante producción, el detalle y cuidado en el diseño del audio, todo fue maravilloso. Un espectacular recordatorio de que la música SÍ puede cambiar las cosas. Pasan los años y cada vez entiendo mejor el peso del mensaje en la pared. Hoy entiendo mejor que nunca lo que significó que el concierto se hiciera en lo que antes fue el muro de Berlín. Hoy entiendo que el mundo en el que yo crecí es tan distinto al actual que espanta, porque el actual es consecuencia directa del pasado. Gracias a Roger Waters por recordárnoslo, y de paso por montar un espectáculo que sí, como dicen varios, es sencillamente el mejor que hay en el entorno del rock. Parte de ya no trabajar ahí es también que ahora debo pedir fotos y esperar a que me las manden jajajaja. En cuanto tenga, subo.

11 comentarios:

flspectro dijo...

¡AMÉN!

Una pieza exquisita Migraña. ¡Óra sí te sublimaste! Encontraste la diferencia fundamental del rock como entretenimiento y el rock como postura ideológica y escojiste el contraste perfecto para mostrarlo. Por supuesto hay gente que está fatigada por los excesos del rock como ideología (la onda "rockista" del prog-rock y otras ondas), pero el rock sin ideología simplemente no es rock, y peor, cuando los "rockeros" utilizan una pose como muleta para su vacuidad ideológica es la peor traición a todo lo que pudo haber tenido de noble y honesto el rock: la apertura a nuevas experiencias y el rechazo a la solemnidad y acartonamiento de las instituciones sociales.

Una pieza de periodismo rocanrolero con todas la letras. ¡BRAVO!

Anónimo dijo...

Migraña

Muy bueno tu post, de verdad comparto mucho tus experiencias y vivencias desde niño con el rock, pero en este caso en especial Roger Waters no ha cambiado, le vale madre lo que digan el firme en su convicción y sobre todo NUNCA CONFIAR EN EL PINCH GOBIERNO, aún así hay millones de borregos pendejos que votaran por el PRI.
KOKOWITTE

Anónimo dijo...

Buena reseña, anecdota o hibrido. El Rock son 2 mundos, el del entretenimiento y el de causa social que tambien puede ser pro guerra como Ted Nugent.

Al final ambos se necesitan, si todos es serio o todo es a la ligera pierde fuerza, nivelar ambos es lo que ha hecho que el genero y todos sus derivados sigan vivos 50 años despues.

Manuel dijo...

Muy buena reseña me imagino debió ser lo máximo, la verdad de tener el varo hubiera ido solo por el espectáculo porque soy fan de lo viejito y psicodelico de pink floyd no tanto del muro a la fecha.

Despues de leer eso solo me queda la duda.. Que pensará roger waters al tirar todas esas consignas y desparramar su idelogia anti capitalista y saber que gracias a OCESA un mostruo capitalista, él pudo estar aca en México y que la COCA COLA que tambien comentas fue embarrada en la podredumbre estaba siendo consumida en mayores cantidades que el agua simple en un concierto de Waters.. que tendra en mente ese genio al encontrar esos elemntos reuinidos en su cabeza?? Que sus boletos hasta el frente superaban los 2000 pesos y eso en venta normal olvidemos la reventa.. cuantos niños del orbe tercermundista podrían comer a gusto con las ganancias que genera a lo bestia el consumismo de su espectáculo???

Caray!! Si, roger es un hombre de rock y de ideologías, pero lamentablemente es parte del mismo sistema que ataca, ni hablar!!

Asael Grande dijo...

JASSO:

Un poco coincido con Manuel, respecto a que, queramos o no EL ROCK ES HOY PARTE DEL SISTEMA: boletaje, espectáculo, etc. Ahora, podríamos decir también: "nada es gratis", "una producción requiere billete" o "Waters dona unos milloncitos", eso, no lo sabemos.

Lo que si es cierto es que, de entrada la historia del álbum The Wall tiene una idea inicial que fue la pérdida del padre de Waters en la guerra. Ahora, por otra parte, cuando inició PF la gira de The Wall, Waters dijo que el espectáculo fue concebido con un Muro gigantesco porque estaba harto de ver al públco y quería experimentar qué reacción sacudía la imposición de un muro gigante, y dejar esta relación público-artista un poco de lado.

ACABO MI COMENT CON:

El rock es ideología? Si!!
El rock es negocio y ambición? Sí!! :U2
El rock es convicción y política (ahora con lo del Zócalo)? Si!!: Paul McCartney

EL ROCK ES CONTRACULTURA?? Sólo tu sabes Jasso.

Saludos de Asael Grande.

Nota: recordemos que el rock (palabra para denominar al R&B) fue primero explotación (en los campos de algodón con el Blues), luego Moda con Elvis, luego negocio con Beatles, luego contracultura en Woodstoock, luego Bisne! ;)

Asael Grande dijo...

...sólo me faltó aclarar que:

hay que ubicar al rock en su justa dimensión, creo yo e ir más allá de
'es que Bono es falso, y habla de la paz con sus gafas de 30 millones de dólares' y no es que uno defienda a Bono o hable bien de Waters o de quien sea, qué bueno que el rock sea todo lo que mencioné antes y que el ritmo del 4x4 nos permita tantas cosas y vivir tantas otras, no crees, Luis?

;)

Saludos men!!

Anónimo dijo...

No se aprendió su discurso en español, lo leyó de un cartón. Las dos noches.

Anónimo dijo...

Roger Waters simplemente es uno de los mejores músicos que hay en la historia del rock. Recuerda que el rock es un estilo de vida que atras del desmadre hay una ideología, que si hay coca en el concierto, que si los boletos, que si la chela, a fin de cuentas cada quien decide que consumir y si lo hace en exceso.
Simplemente un concierto chingón y eso que lo he visto más de 6 veces. En cada país averigua de su situación actual y la trata de incluir en el show. Por cierto los grafitis del lado derecho del escenario estaban bien cabrones desde el 2 de octubre (que personas no sabian ni pedo de la fecha) hasta la cruz para las muertas de Juárez.

davidian dijo...

tiene razón Manuel. Es muy fácil irse con la finta de que un músico es contestarario, honesto y bla bla blá. Waters hace muchas de las cosas que hace Bono, viaja en primera, viste bien, gafas caras, cobra los boletos caros, etc. Que uno te guste y otro no es otro pedo. Ambos son rockstars.

Los verdaderamente rebeldes son anónimos, o ya están muertos. Esto es business, mainstream, no confundir

Anónimo dijo...

El deseo de superarse y llegar donde nadie a llegado antes es lo que ha logrado que la humanidad este donde esta hoy en dia, claro que hay problemas pero sin esta mentalidad todavia viviriamos en cuevas.

No se puede volver villano a quien tien exito, sea una empresa o un artista que gana millones y aun asi pide la paz o ridiculeses como Bono que pide le perdonen la deuda a paises pobres (ya quiero verlo perdonando una deuda a el). Mas bien tenemos que ser concientes que aun teniendo una buena vida tenemos que pensar en los demas.

Anónimo dijo...

Pienso que no hay que quebrarse la cabeza, alguna vez lei que Waters escribo the wall pensando en todos los pedos personales que traia en la cabeza, claro que con el tiempo se le ha dado otro enfoque o sera que cada quien le da el enfoque que desea, a final de cuentas es un buen espectaculo con rolas que pueden tocar ese punto sencible que todos tenemos por una u otra causa, recuerden lo que dijo lennon, "EL ECHO DE DECIR ALGO EN UNA ROLA, NO QUIERE DECIR QUE TENGA LA RAZON, TALVEZ HOY ME LEVANTE Y POR QUE CAGUE BIEN, ESCRIBI UNA CANCION DE AMOR" el echo es que como dicen cada cabeza es un mundo y cada quien cree lo que quiere creer.
Saludos...
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