domingo, septiembre 15, 2013

Wacken 2013

Algo me dice que esta será otra entrada larga, hay mucho que contar. Y como este blog ha funcionado infinidad de veces como una especie de diario, lo que quizás no se entienda bien, en realidad no es relevante más que para mí. Lo demás lo trataré de dejar lo más claro posible.
Este fue mi décimo Wacken. Y así de fácil se escribe aunque trae consigo la frase una laaarga carga de anécdotas, vivencias, risas,. lágrimas, problemas, alegrías y mil cosas más.
Este año fue el primero en el que me fui sin querer hacerlo. Mi estado anímico era el peor que he tenido en esos diez años. Perdí lo que muy tarde descubrí como algo verdadero, real e infinitamente satisfactorio. Ni hablar, así son las cosas..
Además estaba el problema (sin resolver aún) del desempleo. Este año, 2013, ha sido más bien un año maldito. Pero mientras no me mate, sólo me hará más fuerte. y con eso en mente, y gracias por supuesto como cada vez hace ocho años ya a una hermosa amiga, hermosa en todo el amplísimo sentido de la palabra, la directora de Marvin, dos semanas antes del festival tuve boleto de avión. Pro primera vez viajé hacia allá por Estados Unidos. Y las anécdotas empezaron justo ahí, en la idea de viajar por el país de las barras y las estrellas. Yo pensaba que quizás mi paso por Nueva York sería compliocado en aduanas y fue bastante fácil. Luego creí que en Houston, de regreso, quizás sería lento el transitar por ahí y hasta camarada de un guardia de seguridad fan de Kiss me hice. Vaya, quisiera decir "pinches gringos esto y lo otro" pero la neta no me tocó nada malo. Londres si fue un poco más mamila connmigo, curiosamente.
Este año llegué a Wacken, o más bien a Hamburgo, la hermosa y misteriosa ciudad que tanto me ha amado y odiado en estos diez años, sabiendo apenas que tocaba Deep Purple. No sabía o no recordaba nada más. Y ya a estas alturas del partido tampoco me angustia que haya quien diga que eso es un acto de sangronería porque "cuántos quisieran ir al Wacken y tú, mamón, dices que no sabes ni quien toca". Bueno, así es. Podría inventarme que estaba super ansioso por esto y aquello pero la verdad es que no, estaba ansioso y deprimido y anímicamente hecho mierda y la verdad ni quería el viaje. Pero ya estaba hecho así que lo mejor que podía hacer era tratar de sacarle lo mejor y no lo peor.
Este año, por primera vez, dormí en un Hostal "patrocinado" gracias a la labor de los amigos de rain Shatter. Primera vez que no me hospedé en el Centro o en la colorida Reeperbahn. Eso estuvo bien por una parte, estábamos alejados del centro y del bullicio, el hostal era bastante chiquito pero muy acogedor y limpio. Me tocó compartir con cuatro Behold The Graves (Tori, Johnny, Jorge y David. Aarón y su esposa se quedaron en otra habitación. Así, la primera tarde/noche la pasamos caminando por el muelle, aguantando la lluvia, cotorreando tranquilamente... bien. La mañana del martes me fui a buscar un corta uñas y la oficina de correo para dejar 25 discos Voltax que irían para el Reino Unido. La calle por la que debía caminar para llegar a la mini placita comercial era todo lo que Alemania es para mí: limpia, todas las casas conm su jardín perfectamente podado, sus botes de basura bien ordenados, sus casas no muy grandes y con arquitectura tipo Chalet suizo salpicado de vez en cuando por edificios no muy altos, fríos a la vista. la poca gente que me crucé de ida y vuelta me sonreía o saludaba, amables, confiados. Alguno quizás por ahí con cara de desconfianza, también. Llovía un poco, y cuando llueve y estás en una ciudad lejana, en un sitio dentro de esa misma ciudad que no conoces y en el cual no te sientes tan cómodo, las lágrimas se confunden con la lluvia. Y como la calle está sola buena parte de su recorrido, puedes hablar, desahogarte, gritar quizás un poco y nadie te escuchará. Y si alguien lo hace, como la señora que estaba afuera de un edificio, fumando, al no entender lo que dices sonreirá con cara de "cámara, este cabrón habla solo y en voz alta" jajajajaja.
Bueno, fin del drama. Mi drama duró todo el viaje pero en este texto llegó hasta aquí.
Los Behold The Grave son personajes espectaculares. Sencillos, amables, entregados a su arte, sin manoseos intelectuales estúpidos típicos de la capital del país. La pasamos muy bien. El miércoles temprano nos fuimos al aeropuerto para que nos recogiera la camioneta de Wacken. Una vez más como las cuatro veces anteriores, todos van tranquis, con ilusión pero hasta ahí. hasta que llegas y ves la monumental camioneta negra con los logos de wacken a los costados y el nombre de la banda en el parabrisas. Ahí cambia todo, cada vez. Y cambia más cuando llegas al Festival y ellos suben en el área de acreditaciones a la recluida a´rea que dice Artist. Y cuando les dan sus gafetes y pulseras. Cuando el primer mundo del rock les besa las ilusiones. Todos estaban emocionados pero mio querido amigo Johnny, de historia de vida complicada, no cabía de la emoción. Y una vez más como las cuatro veces anteriores, ese momento es el que hace que todo valga la pena.
Y a muchos no les interesa la Batalla y está bien. pero es lo primero que sucede, desde el miércoles al medio día hasta casi la media noche y luego durante cuatro horas en el medio día del jueves. Y en ese contexto, en la enorme carpa destinada para la batalla me encontré a Lamia Serpent y El Gato. Y las chelas resbalan por la garganta, y ya medio pedo sueltas la lengua y abres parte de tus sentimientos y bueno, dije que el drama se acababa atrás, así que sin más que decir. Los Behold tocaron el jueves. Les fue muy bien. Y una vez más los veía yo en ese enorme escenario, sobre todo comparado con el escenario típico para tocar en México, que suele ser un bar. Acá todo es profesional, y las bandas no necesitan conectra sus equipos, hay quien lo hace por ellos, y te atienden con total profesionalismo, y ellos como los cuatro anteriores lo agradecían de verdad. porque los nervios previos a empezar se les notaban, como a los cuatro anteriores. Y como los demás, tienen su ritual previo a salir a tocar, pero eso es privado. Al final les fue bien. la gente los recibió realmente entusiasta, y si bien no quedaron mejor que Voltax u Orcus, recibieron algunos votos de los jueces, lo cual es en dí ya una gran victoria: sólo 11 de los 30 países recibieron votos de los jueces, así que de entrada no estuvo nada mal.
Y el capítulo batalla de esta entrada se termina ahí donde todo comenzó, en una carpa lejos de los escenarios principales. En 2014 no habrá Metal Battle México, será hasta el 2015. La historia es realmente muy sencilla, aunque algo me dice que cuando lo haga público en los espacios Batalla, todos esos que se han quejado de fraude, ahora se van a quejar de que México no esté en Wacken el año que viene. Jajajajaja, ya los veo venir.
2014 tiene a 37 países inscritos pero sólo se cuenta con 30 espacios para participar. Otros años han sido 32 0 33 y se ha resuelto porque dos o tres deciden tomarse un sabático. Es así de fácil. México sigue siendo parte de Metal Battle, pero este año había necesidad de que siete países tomaran la pausa y sólo dos levantaron la mano: el combo llamado Centro América (una sola banda que sale de una batalla que abarca Panamá, Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Costa Rica) y Uruguay. Faltaban cinco más y se hizo una lotería (sorteo). México salió sorteado y eso significa que no participará en 2014 con una banda (puede mandar juez) y regresará sin mayores dramas en 2015 (cuando sales sorteado se garantiza tu participación por lo menos en los dos años siguientes a tu descanso, es decir, México está firme para 2015 y 2016). Así de fácil, pero apuesto mi sangre a que en las semanas siguientes, será increíblemente complicado. Veremos.
El Festival:
Ya estando ahí, obviamente te enteras de quienes van a tocar y claro, te emocionas con algunos nombres. Yo ví de pe a pa y los gocé como siempre lo he hecho, a tope, con Deep Purple. Sencillamente es una bandota. Excelente set list, tributo a Dio, grandes músicos... poco más se les puede pedir.
Por ahí me preguntaban por Rammstein por ejemplo. Vaya cantidad de gente. Igual o más lleno que con Maiden aquella vez hace dos o tres años. Curiosamente, porque yo esperaba todo lo contrario, su espectáculo visual no fue lo sorprendente y espectacular que se podría esperar, sobre todo pensando que estaban "en casa" y que era al aire libre. Sin mencionar además que ellos eran la banda estelar el día que tocaron. Sí, mucho fuego, las escenas clásicas de "bestialidad", el incendiar al tecladista... lo mismo que han presentado en México. No más, no menos tampoco. No sé exactamente qué me esperaba, pero sí se que era más de lo que ofrecieron. Visualmente, insisto. En cuanto a la entrega del público, total.
Me tocó ver show de aniversario, 30 aniversario nada más de Doro. Ya no llovía pero igual las lágrimas se fundieron con las de otros más. ¿Por qué lloró cada cuáles? No sé. Sólo sé que parte de su discurso, su total entrega, su increíble capacidad de hacer himnos, su belleza y mi estado de ánimo se fundieron y disfruté a Doro como si fuera Kiss y yo tuviera 16 años. Lo chistoso fue ver al cantante de Sabaton, invitado en All we are, olvidando la letra. ¡carajo! la letra sólo dice "All we are, all we are we are, we are all, all we need". eso es todo, y se le olvidó. Imposible no reírse. Y Doro se le acercaba y le cantaba en la cara para que se acordara y éste nomás se ponía más nervioso. Buen momento ese.
Otra que disfruté más que nunca, y eso que los vi con Messiah Marcolin en 2005 fueron los Candlemass. ¡Qué marea de doblegar la distorsión y jugar con los tempos lentos! Magistral banda, magistral presentación, hermosas alabanzas al dolor espiritual. Y eso que tocaron al mismo tiempo que Alice Cooper. Cuando iba caminando hacia el Party Stage, Alice tocaba House of Fire. Y claro, ni modo de no escucharla y verla. terminó y seguí mi camino y afortunadamente llegué 20 segundo antes de que Candlemass empezara. y los ví la hora entera, y no me arrepiento de ni un segundo de esa hora maravillosa. Ya de regreso al campamento pasé de nuevo por el escenario donde estaba Alice y aunque ya no me tocó ver la guillotina y todo el numerito (que afortunadamente ya vi ahí mismo), pude ver y escuchar Poison, su versión de Schools Out con parte de Another Brick on the Wall Pt II clavada, I'm Eighteen y tres o cuatro más. Con eso, ¿quién se puede quejar?
Ví a Gojira por primera vez. No me desagradó pero tampoco veo de dónde viene tanta alabanza. Caso contrario Trivium, una banda que a mí me parece poco valorada y de enorme capacidad. Y seguramente vi más bandas pero en este momento no me acuerdo. Sé que no ví a Motorhead, que sólo tocó media hora. Ví a Anthrax y me quedé espantado en el buen sentido de la maravillosa maquinita que son hoy en día. Me los perdí en el Force Fest y acá me saqué la espina. Debe haber sido la mejor de todas las veces que los he visto en vivo, por mucho. Sencillamente espectacular. Por primera vgez en mi vida pude ver a Annihilator, y por primera vez en mi vida pude cantar Alison hell, en uno de los momentos más espectaculares que viví allá.
Este año salí más al pueblo. Ese Johnny de Behold The Grave es todo un loquillo y excelente compañía. ¿Cuáles problemas existenciales cuando vas con él en la calle? En general un buen Wacken, el décimo en mi cuenta sin que jamás me propusiera semejante cantidad. El primero en el cuál no estaba arriba de los 100 kilos de peso y vaya que se nota la diferencia jaja. Muchísimo calor cuando quiso salir el sol y horribles inundaciones cuando cayó el agua. Pero este año por lo menos llovió muchísimo menos, con casi dos días enteros de puro sol.
Y de ahí a Hamburgo una vez más. me despedí de ella, de esa ciudad mágica que no sé si veré otra vez. Quizás sí, pero quizás no. Fue una despedida triste y dolorosa. Y pasaron diez años para que la recorriera por barco, en sus marrones aguas. Y la perspectiva cuando ves su silueta recortada contra el cielo, vista desde el agua, es totalmente diferente a como la ves y la vives andando a pie, en el metro, en autobús. Es pues una ciudad de la que nunca te aburres, aunque tenga sus callejones de siempre, sus bares de toda la vida, sus mismas mujeres de la noche, sus sonidos inconfundibles, sus barrios de colores. Han sido diez años muy placenteros estando ahí, aunque algunas veces fuera sólo para dormir. Ahí he amado, bebido, sufrido... todo lo que tiene que ver con el aspecto emocional de viajar. El majestuoso edificio de la hauptbanhoff se mantiene impasible en el centro de la ciudad. Es algo difícil de explicar pero al menos para mí, Wacken no sabe igual si uno no pasa por Hamburgo.
Veremos qué pasa en el futuro, mientras, insisto: ese es un viaje que todo metalero debe intentar por lo menos una vez en su vida. 2014 será año de aniversario, de 25 años de Wacken, será espectacular.

4 comentarios:

ValhallaWarrior dijo...

Alguna vez en este blog alguien comentó que escribías muy bien, algún otro preguntó cual era tu secreto, alguien contestó que era que te drogabas antes de escribr.

Me consta que no te drogas.

Y me consta que eres extremadamente "disperso", es decir, se ta van la cabras al "slam" y no sabes dónde quedaron.

Me dices que cuando escribes lo haces de principio a fin y que no revisas tus textos.

Siendo tan disperso y distraído no sé cómo lo logras...

Hermoso texto sin lugar a dudas...

P.D.
Te odio por haber ido al Wacken 10 veces y yo ninguna...

P.P.D.
Besitos ;-)

Anónimo dijo...

Muy buena reseña Migraña,

Como siempre el toque personal y emocional le da más profundidad al texto.

A mi este Wacken también se me hizo muy bueno, sobre todo las presentaciones de Alice Cooper, Sabaton y Die Apokalyptischen Reiter, estos últimos se notaba que estaban "jugando de local" jeje

Espero sinceramente que tu situación mejore y puedas seguir viviendo a tope las próximas ediciones del festival.

Desafortunadamente para mi no habrá Wacken en 2014 porque el festival fue Sold Out a 2 días de salir a la venta los boletos.

Saludos.

Dagon

Anónimo dijo...

Excelente texto.

Saludos desde la tierra del cabrito y la carta blanca.

JimiHdx!!!

Anónimo dijo...

Saludos Migraña !!

Lo que dices de los Behold es verdad. Son unos tipazos. Despues de su presentación en Wacken nos quedamos mucha banda cotorreando dentro y fuera de la carpa; cuando ya andabamos afuera, llegaron con nosotros a cotorrear y nos regalaron copias de su cd Demo "A World Apart" (que por cierto esta de huevos) y nos los firmaron; el batako le firmó la baqueta al compa que la agarró.

Una de las cosas mas chidas de Wacken....es la gente con la que convives alla. Ayer en el concierto de Maiden estuvimos juntos alrededor de 20 personas que fuimos al W:O:A este año...la pasamos de poka madre....

y ni pedo...a esperar la Metal Battle para el 2015.

RM