Malmsteen

Maldita sea mi suerte ¡carajo!

Hace unas semanas, la chica que hace prensa de Eyescream ofreció entrevistas con Yngwie Malmsteen. Yo dije que sí. Ella me pidió un número de contacto. Y luego no supe nada más. Supuse, gran error, que no pasaría más. Gran error confundir lo supuesto con lo comprobado. Sobre todo porque ayer a las 8:20 de la noche me mandó un mail avisándome que hoy a las 12 era mi entrevista. Claro, eso yo no lo supe hasta hoy a las 11:57 que abrí mi computadora. Cuando vi su nombre y el asunto Entrevista Yngwie Jueves, quise con todas mis ganas que fuera el jueves que viene. Y en eso estaba cuando suena el teléfono:
Hola
Hola, is this Luis?
Yes
Hi, this is Yngwie Malmsteen

¡Puta madre! No traigo mi grabadora y no preparé nada de entrevista. Bueno, tanto así como preparar nunca lo hago, pero me doy mis vueltas en dos tres páginas para recordar al artista, para sacudir las telarañas de mi memoria (en casos como este) e imaginar más o menos por donde me puedo ir con mis preguntas. Hoy nada de eso fue posible. Así pues, ahorita que más o menos está fresco y que tengo mis apuntes frente a mí, trataré de exponer lo que fue esta entrevista.

Luego del shock de contestar el fon y que el que habla sea Malmsteen, lo primero que se me ocurrió fue preguntarle que músicos lo acompañan
“Doogie White en la voz, Patrik Johansson en la batería, Mick Cervino en el bajo y” acá llega el primer problema de no haberlo grabado, como me los dijo rápido, sólo pude4 apuntar Troy en los teclados. En su página oficial y en el myspace oficial, donde se anuncia la gira latinoamericana, dice Line Up to be announced. Ni modo.


Sí tocaste en Alcatrazz ¿verdad?

Lo segundo que se me ocurrió, estúpidamente, fue decirle algo como ¿qué opinas de la reunión de Alcatrazz?
“jajajaj, nada”.
Creí entonces que era un error, así que más estúpido, voy y le pregunto ¡estuviste en Alcatrazz no?
“jajaj, claro, es mi banda, yo la formé” Daaaa, Migraña imbécil, pero él muy amable y muy risueño, por lo menos no me hizo sentir peor. “Mira, si ellos quieren hacerlo y creen que es algo bueno, que Dios los bendiga, yo no tengo ningún problema. Lo único es que cuando haces una reunión, lo lógico es que sea con los originales, y acá no son los originales ¿sabes? Jajajaja”

Otra pregunta genérica para salir del paso en lo que se me ocurre algo más. ¿Qué recuerdas de México?
“No mucho, estuve muy poco tiempo y no pude conocer casi nada. Pero recuerdo muy bien a la audiencia, muero por tocar para ellos otra vez, fueron geniales. Y recuerdo al crew (los técnicos), fue uno de los mejores que me he topado”.

Le pregunté si sabía que iban a tocar.
“No, no lo he decidido. Normalmente nunca sabemos que vamos a tocar, la banda nunca sabe, suele ser sobre la marcha, pero está bien, ellos saben que eso hago, saben que deben estar preparados y han tocado conmigo antes, así que no hay problema. Casi siempre el concierto se mueve de acuerdo al sentimiento que me provoca la audiencia, por eso no hago set list, porque casi nunca lo seguimos jajajaja”.

Le pregunté sobre la improvisación...
“Oh sí, la improvisación es el sustento de todo. Desde que tengo como 15 o 16 años lo hago así, todo es improvisación, cuando creas una composición, de origen estás improvisando. Me encantan los jams, y tengo una banda que es muy buena para hacerlo”.

Le pregunté entonces que si era de alguna manera como incorporar lo clásico del jazz en un ambiente de rock:
“Claro, digamos que soy como un solista y me voy a diversos lugares musicalmente hablando, y el trabajo de la banda es seguirme, pero te repito, son una gran banda y lo hacen muy bien”.

Le pregunté si ha grabado algo nuevo, si tocará algo nuevo:
“Oh sí, en la primavera de este año estuve grabando junto con Patrick, tenemos ya 29 canciones o tal vez maquetas de canciones listas”.

¿Compones en la guitarra siempre? Se que tocas el piano.
“Bueno casi siempre compongo sobre la guitarra, pero a veces lo hago sobre el bajo o la batería. Verás, también soy baterista así que hay ocasiones que compongo un ritmo en la batería y de ahí me sigo con los demás instrumentos. Lo idea es no seguir una fórmula, igual compongo en el piano, pero nunca es dentro de un formato definido”.

Luego le pregunté si con el nivel que alcanzó ya, sigue practicando, creo:
“Es una cuestión de técnica, llega un momento en el que la técnica deja de ser una barrera para uno como músico, lo dominas. Es cuestión de dominar las notas y de ahí crear. Las notas son la razón de todo lo que escuchas, entonces cuando dominas la técnica se reducen mucho las barreras. Sin embargo eso no significa que dejes de practicar, yo aún todo diario, tal vez no practico horas y horas pero todos los días toco, eso me mantiene fresco como músico”.

Luego tengo apuntado Clásico: jajaja, no se que fue aquello, pero mencionó algo de la familia, de su hijo, así que le pregunté que tanto cambia la vida de un músico con la paternidad.
“Bueno cambia mucho, de pronto tienes que ser responsable. Cambia tu visión de muchas cosas porque tienes que hacerte cargo de él, pero yo lo hago con mucho gusto y mucha pasión, amo a mi familia. Y sobre las giras bueno, aprendes a acomodar todo y te acostumbras. Además hay veces que él viaja conmigo así que no es tan difícil como algunos creen”.

Luego le pregunté sobre su pasión por la música clásica, por Paganini. Su respuesta fue muy larga y llena de tecnicismos sobre la guitarra. Lo siento mucho pero sin grabadora, sólo puedo rescatar lo que no era muy técnico.
“La más grande influencia para mí fue el violín. La música de Vivaldi, Tchaikovsky”. Aquí no estoy muy seguro, pero más menos hablamos esto: “Las escalas en el violín son de 8 notas. En cuanto a los guitarristas, el 99.9% tocan sobre escalas de blues, de 5 notas. Siempre he creído que influenciarte con otros guitarristas es como una especie de incesto. Yo toco el instrumento desde los 5 años, y de muy joven me inspiraba mucho lo que hacía Ritchie Blackmore, pero escuchando a Bach por ejemplo aprendí que existían otras escalas” Mencionó algo sobre arpegios, sobre la forma de componer y tocar, sobre afinaciones, pero tristemente no lo puedo reproducir. Para eso les recomiendo (porque seguro explica lo mismo aunque sea con otras palabras) algunos artículos y entrevistas que se encuentran en este link


También a Malmsteen le dio por el look glam

¿Aprendiste alguna vez a tocar el violín?
“No el violín, toco un poco el Cello”.

Le pregunté si el hecho de ser un músico virtuoso implica una barrera con la gente. Su público, como yo por ejemplo, no entiende en general lo que ve, no es fácil entender de escalas y arpegios y notas y demás. Supongo que eso él lo sabe, ¿qué opina?
“Creo que no debería ser una barrera. Que el público no sea compuesto de músicos es lo de menos. Es por ejemplo como Star Wars, tú vas al cine y ves toda esa acción, y las naves volando y las batallas y es fantástico, pero tú no sabes como hacerlo. Igual pasa con los deportes, a mi me encanta el tennis, y lo juego, pero jamás seré como Roger Federer, y sin embargo está bien. El chiste de todo es la fascinación que determinadas actividades puedan provocar en la gente. Hay veces que ese sentimiento se puede volver sobrecogedor, pero creo que el meollo del asunto lo expuso perfectamente Nicolo Paganini, el decía que debes sentir mucho aprecio por lo que haces para que los demás lo aprecien también. Músicos como BB King y otros son fenomenales, sienten su arte y lo transmiten”.

Le comento entonces que yo lo escuché la primera vez hace como veintitantos años, en los días en que pululaban los grandes guitarristas, pero que según yo él era el único que lograba involucrarme con su música, el único que lograba meterle sentimiento y que no te hacía sentir que era algo muy elevado para uno
“Oh muchas gracias, de verdad eso me halaga mucho porque de eso se trata. Yo no toco para mí sino para la gente. Se debe encontrar un balance y luego es difícil”.

Luego le pregunté sobre la complejidad de escribir canciones y ceñirse a un formato, las rolas no pueden durar siempre media hora, esa era la idea de la pregunta.
“Mira, lo difícil es escoger las piezas. Te decía que tengo listas 29 canciones para el próximo disco, el problema es que esa cantidad de canciones no caben en un disco, entonces debes escoger. Eso en vivo por ejemplo, no representa un problema, ahí te extiendes lo que quieras y tocas lo que quieras, pero así pasa, es un dilema jajajaja”

Le platiqué un poco del Salón 21 para ver que le gusta más, ese tipo de inmuebles, festivales...
“Un lugar como ese, para 3 mil personas, me parece el espacio ideal. Un lugar para 800 personas por ejemplo me parece chico. Me encanta la interacción de ese tipo de lugares, pero me parecen chicos, tienden a ser incómodos, el equipo no ofrece mucho potencial. Y luego un festival, pues también tiene su chiste, es muy alegre todo pero cuando tienes a 100 mil personas frente a tí, cuesta mucho trabajo entablar una comunicación con ellos. Así que prefiero lugares como el salón 21”.

Sobre los 90 y la debacle del metal y hard rock:
“Pues no fueron buenos tiempos en estados Unidos, pero fueron lo suficientemente buenos en el resto del mundo como para que algunos músicos como yo pudiéramos mantenernos. Estados Unidos sí cambió mucho, de Europa no se bien pero me consta que América Latina y Asia siempre mantuvieron viva la llama. Fueron años duros para los guitarristas”.


Así se va ahora. Yo esperaba que se pusiera loco pero resultó ser un pan el tipo

Luego no recuerdo bien la pregunta, pero fue algo de que ya nadie tocaba la guitarra y que los 90 mataron a los solistas:
“Bueno, pero la historia se repite, no te creas que sólo sucedió en los 90, pasó también en los 70. A principios de esa década surgieron grandes guitarristas, como Blackmore y muchos más, pero hacia el final, eso estaba muerto. Llegaron el punk y otras cosas y nadie tocaba la guitarra. Y pasó en los 80 y luego en los 90, es cíclico. Yo sobreviví esos altibajos porque no me guío por las tendencias, siempre hago lo que yo creo que es correcto, y eso a veces hace que uno se vuelva más grande o más chico, pero seguí siempre mi corazón y aquí sigo”.

Le pregunté sobre Blackmore’s Night:
“Mira, si él quiere hacerlo entonces que Dios lo bendiga. Yo tengo muy buenos recuerdos de su música con Rainbow y Purple. Todavía escucho discos como In Rock, Fireball, Made in Japan y cada vez me sorprende, siguen siendo increíblemente buenos.”

Sobre su éxito en Japón:
“Estuve con una banda que se llamaba Steeler, era una banda local de Los Angeles, pero ahí estuvo Graham Bonnet después de Rainbow. Y Rainbow en Japón era enorme, entonces cuando fui la primera vez iba con Graham de cantante y eso abrió muchas puertas. Los japoneses nos amaron desde el principio y desde entonces, siempre me va muy bien”.

Sobre la onda de que los japos siempre tienen bonus tracks:
“Ah, eso es porque los discos son carísimos, entonces los artistas que venden bien ponen bonus tracks para que el consumidor sienta que paga mucho por algo especial. Es una cuestión de política de la industria básicamente”.


Cualquier parecido con Ritchie Blackmore, nunca será mera coincidencia

Sobre sus metas:
“Pues metas específicas no tengo. Lo que tengo es una visión de componer un concierto para guitarra eléctrica y orquesta, no algo en lo que ambas se mezclen sino escribir propiamente un concierto para guitarra eléctrica y orquesta. Ahí la guitarra sería el instrumento solista, como un violín por ejemplo”.

Le pregunté si una persona se le acerca y le pide nombrar un disco para empezar a conocer su música:
“Oh esa pregunta siempre es muy difícil de contestar. Por ejemplo, si te digo Rising Force, eso sólo es una aparte de lo que he hecho, faltaría la onda de la orquesta que hice. No se, todo lo que he hecho ha sido con mucha pasión, así que no podría contestar esa pregunta jajajaja”

Le dije que me soprendía lo amable que es, pensaba que era más mamila, esa es la fama que tiene, pero dice que es parte del cotorreo, que no se lo toma personal. En fin, puso quedar mejor, lo se, pero dadas las circunstancias, no estuvo tan pior jaja.

Toca el día de la virgencita en el Salón 21. Ese día me toca Billy Joel, maldita sea mi suerte dos veces.

Migraña, sin suerte